Finaliza la Semana Mundial de la Alergia

La alergia afecta a tres de cada diez personas

  • Las alergias respiratorias, como la rinitis, son las más comunes. La inmunoterapia sublingual es un avance en su tratamiento. Cuáles son los principales síntomas.

De la Redacción de El Litoral

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En el marco de la Semana Mundial de la Alergia -que finaliza hoy-, la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (Aaaeic) destacó los últimos avances en el tratamiento de las alergias, que padecen tres de cada diez personas en el mundo.

Las alergias más comunes son las respiratorias, entre las que se incluye la rinitis y el asma bronquial. Entre 400 y 500 millones de personas en el mundo padecen rinitis, un fuerte desencadenante de asma, la enfermedad respiratoria crónica más común en los niños.

La alergia puede producir desde una anafilaxis (reacción extrema, con riesgo de muerte) hasta una crisis asmática grave, entre otras consecuencias. “Se trata de una condición genética que debe tratarse. En el caso de las alergias respiratorias, se indican medicamentos para controlar los síntomas, para tratar el proceso inflamatorio e inmunoterapia para tratar la causa de la enfermedad”, indicó Gabriel Gattolin, médico santafesino presidente de la Aaaeic.

“La inmunoterapia específica es la administración gradual y progresiva de un alergeno (lo que nos da alergia o nos hace mal), para lograr contrarrestar la reacción exagerada y descontrolada del sistema inmune contra ese mismo alergeno”, especificó. Estos alergenos pueden ser ácaros de polvo doméstico, hongos aerógenos y pólenes de plantas, entre otros.

Cuando la inmunoterapia está bien indicada, “la eficacia es muy alta para reducir los síntomas clásicos de rinitis y asma y para evitar hacernos alérgicos a otros alergenos”, aseguró.

Avances

Una de las novedades para controlar los síntomas es la inmunoterapia sublingual. “Hace algunos años que disponemos de vacunas sublinguales, tan efectivas como las tradicionales subcutáneas, pero con un mayor nivel de seguridad”, afirmó Gattolin.

La vía sublingual ofrece una tolerancia muy alta, con eficacia similar y es menos molesta que la subcutánea. “Una vez diagnosticada la alergia, el primer objetivo es determinar la causa para evitarla y no padecer los síntomas y sus complicaciones, que en algunos casos pueden ser fatales. Antihistamínicos y corticoides de acción local son algunos de los fármacos que se utilizan con mayor frecuencia. Si bien en su mayoría suelen ser efectivos, generalmente no modifican la historia natural de la enfermedad, por lo que el médico seguramente indicará complementar el tratamiento con inmunoterapia, un abordaje más amplio para el que hoy se dispone de alternativas modernas, seguras y eficaces como las medicaciones por vía sublingual”, concluyó Claudio Parisi, secretario de la Aaaeic.

Rinitis vs. resfrío

La rinitis es una manifestación de la alergia respiratoria. “Es una enfermedad muy común, que afecta la calidad de vida de una de cada cinco personas, ya que interfiere con el sueño, produce una alteración de las actividades deportivas, laborales y escolares, y molestias por sus síntomas”, afirmó la especialista Iris Medina.

Los pacientes suelen acudir a la consulta de alergia porque siempre se encuentran “resfriados”. “Los síntomas del resfrío guardan muchas similitudes con los de las rinitis alérgicas. La inflamación de la mucosa nasal ocasiona obstrucción, estornudos y rinorrea acuosa”, explicó Medina.

Las características de la rinitis incluyen: rinorrea (“agüita” que gotea permanentemente de la nariz), picazón en la nariz, estornudos en salva, obstrucción nasal y picazón en ojos y oídos. El paciente puede presentar síntomas todo el año o en determinada estación.

La mitad de los casos de rinitis alérgica es provocada por los ácaros de polvo doméstico, que anidan en los colchones, la ropa de cama, alfombras, cortinas y los muñecos de peluche. La higiene y las medidas de prevención son útiles, pero no siempre bastan.

Según Medina, “estas enfermedades son más frecuentes en niños y adultos jóvenes; no obstante, pueden aparecer por primera vez en edades medias o avanzadas de la vida. Una vez que han aparecido tienden a persistir, y es raro que remitan espontáneamente sin tratamiento específico”.