Mirada desde el sur

La patria socialista

por Raúl Emilio Acosta

Las elecciones 2015 enfrentan, en esta provincia, a la derecha siglo XXI y a otra formulación del “progresismo”. Estatista, como el kirchnerismo, pero con diferencias.

En 1989, Héctor Cavallero obtiene la intendencia de Rosario. En 2007, Hermes Binner resulta gobernador, con 864.000 votos sobre los 688.000 de Rafael Bielsa, y enr 2011 Antonio Bonfatti, con 688.000 votos sobre los 612.000 de Miguel del Sel. El peronismo K es tercero con Agustín Rossi, que colecta 387.000 votos.

La patria socialista es, desde 1989, Rosario. Desde 2007, la provincia de Santa Fe. El socialismo se encuentra, en el 2015, en una situación particular. Debe reformularse. Hay nombres que existen, como dirigentes, desde 1960. Es mucho tiempo. Si consideramos a Héctor Cavallero, Hermes Binner, Miguel Lifschitz y a la señora Fein como lo que es -una secuencia socialista-, el partido gobierna Rosario desde 1989.

Aclaración. La “región Rosario” suma el 43% de los votos reales de la provincia. Quien maneje este territorio pone condiciones en la provincia (como hace la provincia de Buenos Aires con el país, igual).

El secreto de la intensidad del socialismo se basa en que es un partido de cuadros, tiene un discurso común y, básicamente, que no hay casos mayores de corrupción. Cuando la oferta creció, el peronismo K actuó con su “Inteligencia” y el narcotráfico rosarino fue tema nacional. Acusación espantosa. Narcosocialismo. Están convalecientes. La policía, aún hoy, no tiene manejo claro. Fracasaron. Si las elecciones fuesen ahora el socialismo tendría problemas. La inseguridad exige culpables.

El uso apropiado del radicalismo (verdadero vehículo utilitario del socialismo) le ha servido para gobernar la provincia. Exageremos: el socialismo administra dineros públicos en ciudad de Rosario y provincia con mil funcionarios socialistas a los que votaron 600 mil socialistas, radicales y antiperonistas. Secuela: es obvia la inoperancia radical y la confianza que oferta el socialismo. Más visible la torpeza peronista. Obeid le entregó la provincia al PSP.

Hay dos peronismos; que un candidato revolee el poncho buscando votos K es singular. Debe sumarse el concierto de “viudos/as”, que no se pueden mostrar pero exigen estar. Un Pami de las chapitas.

Orden socialista. Quieren sumar votos. Quieren manejar la Cámara de Diputados. Quieren un diploma de supervivencia. Quieren marcarle el territorio a su candidato, Lifschitz, o auditar fuertemente a Del Sel y no confían en los radicales en el Poder Legislativo. Esas razones son visibles. Hay (habrá) otras. Es curioso que abandonen el plano nacional. Santa Fe renueva 3 senadores y 10 diputados nacionales. Al colocar a todas sus espadas en cargos legislativos provinciales, la orfandad para los cargos nacionales es grande, muy grande. Repasemos. Antonio Bonfatti, Héctor Cavallero, Rubén Galassi, Clara García, Silvia Augsburger, Eduardo Di Pollina, Rubén Giustiniani. Cualquiera sea el resultado de la elección serán diputados provinciales. Socialistas de paladar negro. Ballenas encalladas en la playa de la Legislatura santafesina. Hum.

El radicalismo tiene un comportamiento anómalo. Corral y Oliver son los más votados del norte provincial. Intendentes de Santa Fe y Santo Tomé respectivamente. Ambos compiten contra Lifschitz-Fascendini. Acompañan a Barletta-Malaponte. Sin los votos radicales no hay socialismo gobernante. Con candidatos radicales nunca se ganó. Problema circular.

En Rosario, el radical más votado es Jorge Boasso quien ya lleva dos elecciones fuera del FPCyS (por eso se sabe cuántos son sus votos) y actualmente integra la fórmula del PRO Federal junto a Miguel Torres del Sel.

El PRO Federal es abiertamente antikirchnerista y antisocialista. Si el peronismo lo apoyase frontalmente, sumaría muchos más votos que el FPCYS (leer otra vez resultados 2011). Ése es el secreto. La fragmentación.

Los dos peronismos residuales y el socialismo sueñan al PJ quitándole votos al PRO Federal. Rarísima semejanza táctica: ¿saben algo que no sabemos?

Según encuestas el peronismo no podía, no puede y no ganará las elecciones del 2015 en Santa Fe. La señora María Bielsa hizo bien. Perder es triste.

No hace falta la “politología” para entender qué se juega en la provincia. Se juega la patria socialista. Los votos se cuentan de a uno, decía El General. Será el 14 de junio a la nochecita.

La “región Rosario” suma el 43% de los votos reales de la provincia. Quien maneje este territorio pone condiciones en la provincia (como hace la provincia de Buenos Aires con el país, igual).