La ciudad de Toronto, capital económico-financiera de Canadá
La ciudad de Toronto, capital económico-financiera de Canadá
Canadá, el segundo país del mundo en superficie detrás de Rusia, es, a su vez, tres veces y media más grande que la Argentina. Allí viven apenas 36 millones de habitantes, con este agregado: el 80 por ciento habita en una franja situada a no más de 250 kilómetros de la frontera con Estados Unidos. La razón es muy simple, es la única zona donde el clima no llega a ser polar.
Textos. Mario A. Laguzza (*). Fotos. Archivo El Litoral.

Amanece sobre el perfil de Toronto. El sol se recorta sobre los altísimos rascacielos del distrito financiero de una ciudad que se disputa con sus pares estadounidenses, los primeros puestos entre las ciudades clave de América del Norte.
Toronto es un conjunto armónico de modernidad, tranquilidad y eficiencia, combinado con un gesto estético sin igual y un buen número de etnias que conviven sin aparentes problemas.
Es esta la primera impresión que despierta el ordenado esplendor de Toronto, corazón armónico-financiero de Canadá, la ciudad más importante del país. Entre sus ciudades, Toronto tiene, juntamente con Vancouver, la particularidad de ser hospitalaria, como muy pocas.
Está situada en Ontario, el principal estado del País, y es lo más parecida a una metrópolis de las que existen en la superpotencia vecina del sur por su arquitectura y modos de vida.
Ya se ha dicho, que es la capital económica y cultural de Canadá y es también la más poblada con 6.300.000 habitantes. “Toronto” quiere decir “lugar de encuentro” y se levanta a orillas del lago de ese mismo nombre : “Ontario”.
La ciudad es el primer destino canadiense de congresos internacionales, contando con tres enormes sitios de ferias y convenciones. Allí se encuentran la cuna de la moda, la gastronomía y la diversión. Su festival de cine, que se hace cada septiembre, tiene fama mundial.
urbe MULTICULTURAL
Gracias a la amplia política de inmigración, Toronto recibió en los últimos doscientos años, una numerosa y variada masa de inmigrantes procedentes de las más diversas culturas que encontraron aquí un lugar ideal de asentamiento que se convirtió en el motor de un pujante aunque silencioso país.
Todas esas culturas no solo han enriquecido económica, visual y étnicamente a la ciudad, sino que han conservado sus barrios con las características y tradiciones de sus lugares de orígen.
Tantas culturas distintas conviviendo en armonía han logrado, además, que la vida en Toronto esté llena de fiestas y celebraciones tradicionales.
HOCKEY, PASIÓN NACIONAL
Otro orgullo de los toronteses es que son la capital del hockey sobre hielo, una pasión nacional. El básquet es su segundo deporte, pero el fútbol está muy lejos del entusiasmo popular. También se enorgullecen del Rogers Center, el estadio multideportivo situado junto a la torre de televisión, que fue el primero en poseer techo retráctil.
Para movilizarse por la ciudad, puede hacerlo mediante el transporte público, que es un verdadero lujo en eficiencia, puntualidad y limpieza.
EL EMBLEMA DE LA CIUDAD
Mirar una ciudad desde arriba es una experiencia diferente, que conviene intentar hacer. Veamos qué es lo que ocurre, subiendo a la altísima Torre CN de Toronto, que con sus 553 metros, es la estructura más alta del mundo y el emblema que caracteriza a esta ciudad.
Pero debemos tener en cuenta que en los Emiratos Árabes Unidos existe desde 2009 el rascacielos “Burj Dubai” en la ciudad homónima, que posee una altura de 800 metros, pero es, repito, un rascacielos, un gran edificio que alberga múltiples funciones, por ejemplo: un hotel, departamentos, oficinas, un banco, etc. Esa es la diferencia con la Torre de Toronto y las demás torres más o menos parecidas que existen el mundo.
La Torre de Toronto posee dos miradores que están situados a diferentes alturas. El principal, que se eleva a 350 metros, es el más importante y también el más visitado. Posee un restaurante giratorio, una tienda de regalos, una cafetería, etc. Una particularidad de este mirador es que un sector del mismo posee su piso “de un grueso cristal”, es decir, transparente. Y los primerizos que la visitan observan al principio con cierta desconfianza antes de colocar, con cautela, sus pies.
El segundo mirador de esta misma torre está situado por sobre los 420 metros y es de mucha menor superficie. Desde esta gran altura se tiene una sorprendente y singular vista de Toronto, con las pintorescas colinas por un lado y el gran Lago Ontario por el otro.
En días claros de cielo diáfano, se pueden observar panoramas que distan hasta más allá de los 90 kilómetros. Los ascensores con que cuentan la Torre CN son cuatro, tres de ellos panorámicos, con vista al exterior.
Esta torre permanece abierta al público todos los días, desde las 10 de la mañana y hasta las 23.
Toronto ofrece al visitante una excelente y variada infraestructura hotelera compuesta por más de 120 establecimientos, de los cuales la mitad se encuentran en el centro de la urbe. Asimismo, posee más de cinco mil restaurantes de las más variadas especialidades.
En lo referente al arte y la arquitectura, tiene varios motivos para jactarse, como el Museo Royal entre otros, es una fuente de cultura inagotable para visitante. Posee 44 salas teatrales, 38 galerías de arte con colecciones permanentes y temporarias, un enorme y bonito shopping denominado Eaton Center con sucursales en las principales ciudades del país, un enorme estadio deportivo denominado Rogers Center, y mucho más.
BAJO TIERRA
Una notable curiosidad que ofrece Toronto, al igual que Montreal, es una construcción obligada por sus bajas temperaturas. Se trata de una “ciudad subterránea” para subsistir en el invierno, la cual reúne todo tipo de comercios, bancos y oficinas, restaurantes y demás negocios en general. Tiene una extensión de 28 kilómetros y es un lugar insólito en el mundo.
La oferta de lugares para visitar en esta ciudad es muy variada, pero por breve que sea la estadía, existen circuitos obligados para el visitante primerizo, que no debe dejar de realizar.
(*) El autor de la nota visitó Toronto en agosto de 2015.



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CÓMO LLEGAR
De Ezeiza hay vuelos diarios a Toronto en unas 12 horas aproximadamente y con una sola escala en Santiago de Chile.