JORNADA MUNDIAL DE LOS POBRES

El Papa advirtió que “la indiferencia es el mayor pecado contra los pobres”

Francisco encabezó una misa frente a 4.000 personas de bajos recursos, inmigrantes y refugiados que llenaron la Basílica de San Pedro. En la ciudad, Cáritas Santa Fe organizó un almuerzo solidario con personas que están en situación de calle.

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En Santa Fe se realizó un almuerzo solidario, con mateada primero y asado después, en la sede de la Fundación Casa San Dimas, en San Jerónimo al 3100, destinado a personas en situación de calle.

Foto: Flavio Raina

 

Redacción El Litoral / Télam

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El Papa Francisco advirtió que “la indiferencia es el mayor pecado contra los pobres”, al remarcar hoy que “cuidar de ellos es un deber del Evangelio” para los cristianos. “La omisión es también el mayor pecado contra los pobres. Aquí adopta un nombre preciso: indiferencia”, subrayó al encabezar la misa por la celebración de la primera edición de la Jornada Mundial de los Pobres que instauró el año pasado. De frente a 4.000 personas de bajos recursos, inmigrantes y refugiados que llenaron la Basílica de San Pedro, aseguró que ese comportamiento “es decir no es algo que me concierne, no es mi problema, es culpa de la sociedad”.

Antes de compartir un almuerzo con 1.500 de ellos en el Aula Pablo VI del Vaticano, el obispo de Roma criticó que esa actitud “es mirar a otro lado cuando el hermano pasa necesidad, es cambiar de canal cuando una cuestión seria nos molesta, es también indignarse ante el mal, pero no hacer nada”. “Dios, sin embargo, no nos preguntará si nos hemos indignado con razón, sino si hicimos el bien”, puntualizó en referencia a que estas jornadas fueron convocadas en 2016, al concluir el Jubileo Extraordinario de la Misericordia, bajo el lema “no amemos de palabra sino con obras. Es para nosotros un deber evangélico cuidar de ellos, que son nuestra verdadera riqueza, y hacerlo no sólo dando pan, sino también partiendo con ellos el pan de la Palabra, pues son sus destinatarios más naturales”, apuntó. “Amar al pobre significa luchar contra todas las pobrezas, espirituales y materiales”, señaló Francisco, para quien “el hambriento y el enfermo, el forastero y el encarcelado, el pobre y el abandonado, el que sufre sin ayuda y el necesitado descartado” son los “predilectos” de la Iglesia.

En Santa Fe

Bajo la organización de Cáritas, y en adhesión a la jornada instaurada por el Papa Francisco, esta mañana se realizó en Santa Fe un almuerzo solidario destinado a personas que viven en situación de calle.

Bajo el lema “no amemos de palabra sino con obras”, la Fundación Casa San Dimas ofreció un almuerzo para compartir con personas que están en situación de calle, con el apoyo de la Pastoral Social y la Pastoral Carcelaria de nuestra Arquidiócesis.

Horacio Suárez, vicepresidente de Cáritas Santa Fe, explicó que lo importante de la jornada es que, en la medida de lo posible, tengamos esa particular conciencia de comenzar a prestar atención a las realidades de pobreza que nos rodean, especialmente a aquellas que ya “no vemos” por habernos acostumbrado a convivir con ellas. “Este proyecto tuvo resonancias más profundas ya que nos obligó a reunirnos y aunar esfuerzos para trabajar en red, con el fin de conocer y saber a quién recurrir ante diversas necesidades”.

En cuanto al almuerzo solidario, Gabriela Candiotti representante de la Casa Juan Diego, destacó que es una excelente oportunidad para compartir con los más necesitados. “A partir de las 11 los recibimos con una mateada y bizcochos y, luego con un rico asado de almuerzo. Es una invitación abierta para toda la comunidad que esta en esa situación”, expresó.

Matías Vecino, representante de la Pastoral Social, invitó a todos los cristianos a hacerse eco de lo que Jesús hizo con nosotros. “Hoy una gran parte de nuestro pueblo es pobre: lo es en el interior del país como también en el cinturón de nuestras ciudades. Esta condición indigna se hace visible en la marginación económica, política y social, y también en la falta de un anuncio de fe que ilumine esas situaciones de carencia, de debilidad y de sufrimiento”.

También en Buenos Aires

El obispo de San Isidro y nuevo presidente del Episcopado, Oscar Ojea, aseguró que en Argentina “hay capacidad objetiva para ponerse de pie” y comenzar a diseñar una política para “comenzar a paliar el tema de la pobreza”. En el marco de la Jornada Mundial de Pobres que se celebra en todo el mundo, Ojea señaló que los esfuerzos por combatir la pobreza “son insuficientes” y que “la deuda social es enorme”, pero sin embargo, destacó que “hay muchísimos argentinos con buena voluntad”. El obispo compartirá hoy a las 20.30 una comida al aire libre con gente de la calle, al finalizar una misa en la parroquia Nuestra Señora de Aranzazu, de San Fernando. Sobre la Jornada Mundial de Pobres, Ojea sostuvo que el Papa Francisco “quiere instalar un día para que la gente tome conciencia de esta realidad, que tiene dos dimensiones: la pobreza como carencia y como don”. “Es un llamado a combatir la pobreza, mirarla más de frente y poder aprender a convivir con lo diverso”, agregó en una entrevista publicada por La Nación. Asimismo, el obispo dijo sobre las reformas que impulsa el gobierno que “en la medida en que surjan de un diálogo auténtico, de un entendimiento entre los distintos sectores, pueden ayudar”. Para Ojea, en el país “hay capacidad objetiva en el país para ponerse de pie y alcanzar una política que, a través de una justa distribución, pueda comenzar a paliar el tema de la pobreza”.

 

¿Por qué una jornada mundial?

“El Papa ha querido instituir esta Jornada Mundial por los Pobres para hacernos tomar conciencia de que es una realidad presente y que no podemos dar vuelta la cara. Sabemos que la pobreza está en todo el mundo. Sabemos que la gran fuente de pobreza es precisamente la mala distribución, el egoísmo, el acaparamiento de los bienes materiales, el olvido de los demás”, explicaron desde el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización.