El Litoral
Gustavo Pérez Castelli, de 55 años, fue acribillado por dos jóvenes encapuchados. Le cortaron las orejas.
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Corresponsalía Rosario
Gustavo Pérez Castelli, de 55 años, fue asesinado anoche por dos personas encapuchadas que no sólo acabaron con su vida sino que también le cortaron las orejas. Este es un crimen con sello mafioso que se inscribe en la escalada de enfrentamientos entre bandas que recrudeció en Rosario en los últimos días.
Castelli es el padre de Justina, la ex novia del empresario narco Luis Medina. Ambos fueron asesinados en diciembre de 2013 en Rosario. A partir de que el gobierno del entonces gobernador Antonio Bonfatti mandó a abrir su computadora se generó una polémica y una investigación judicial que avanza con mucha lentitud en los tribunales.
El crimen de Castelli encaja en la seguidilla de enfrentamientos que se desató durante los últimos días. El otro personaje que aparece en el trama es Emanuel Sandoval, a quien anteayer fueron a matar en el barrio Casiano Casas pero sus soldaditos resistieron. Y terminaron heridos dos chicos de 7 años que jugaban al fútbol en el club Defensores de América.
Emanuel Sandoval está libre desde febrero pasado. Era el único imputado en el ataque a la casa del ex gobernador en octubre de 2013. Pero Bonfatti retiró su imputación en noviembre pasado y Sandoval terminó aceptando su participación en el ataque en un juicio abreviado que lo condenó a tres años y medio de prisión.
Como había cumplido parte de su condena en prisión domiciliaria y quedó libre. Sandoval era uno de los engranajes de Medina y Alvarado, quienes fueron socios hasta mediados de 2013 y después se pelearon. Una de las hipótesis de las investigaciones que nunca avanzaron en los tribunales es que Alvarado mandó a matar a Medina.
Uno de los que ejecutó ese crimen fue Darío Sebastián Fernández, conocido como El Oreja. Fernández fue asesinado a principios de diciembre pasado. Su cuerpo apareció en un descampado de la autopista Rosario-Santa Fe sin las orejas. Es el primo de Sandoval, quien luego de que apareció el cuerpo del Oreja denunció que lo iban a matar y pidió custodia de las fuerzas federales. Al cadáver de Pérez Castelli también le cortaron las orejas.