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La autopsia practicada a la niña de un año fallecida el sábado en Santiago del Estero confirmó que murió por las patadas que recibió en la cabeza y otras partes del cuerpo, dijeron hoy fuentes de la investigación, y señalaron que hasta esta tarde nadie había retirado su cadáver de la morgue.
Las fuentes explicaron que ante la detención de su madre, de 18 años, y la inexistencia de familiares directos de la joven en esta provincia dado que es oriunda de Buenos Aires, el cuerpo de la niña seguía hoy bajo la órbita judicial.
Además, recordaron que el novio de la joven, también menor de edad y detenido por el crimen, es oriundo de la localidad de Taboada, donde residían como pareja, pero no era familiar directo de la niña.
Según las fuentes, la pareja se había conocido en la provincia de Buenos Aires, adonde había viajado el joven como trabajador golondrina. Los jóvenes acordaron continuar la vida en común en el pueblo de Fernández, ubicado a 75 kilómetros al sudeste de esta capital provincial.
Sin embargo, el joven no terminaba de aceptar a la hija de su pareja y al parecer le habría pegado con anterioridad a la agresión del sábado último, sin que la madre biológica expusiera lo sucedido a la Policía, añadieron las fuentes.
De acuerdo con los datos recabados por los investigadores, la niña había estado internada en el hospital zonal Rudecindo Cazzaniga de Fernández una semana antes de que arribara sin signos vitales a la guardia del establecimiento, por problemas de salud no vinculados a una golpiza.
Los fiscales Sebastián Robles y Mariano Gómez se trasladaronesta tarde hasta la Comisaría 35 de Fernández para entrevistarse con el joven detenido, quien mañana podría tener su primera audiencia oral con un juez de Control y Garantías en esta capital. En tanto, la madre de la niña fallecida quedó alojada en la Comisaría Segunda del Menor y la Mujer de La Banda.