Mario Cáffaro
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La Cámara de Diputados votó la autorización para que el Poder Ejecutivo tome del mercado hasta 556.365.000 de pesos que deberán ser devueltos antes del 30 de noviembre del corriente año y en el paso por las comisiones introdujo reformas al texto que había aprobado el Senado en el mes de abril. A los pocos minutos, el Senado aceptó los cambios y dejó sancionada la norma que traerá alivio momentáneo a las cuentas públicas de la provincia así como de los municipios y comunas ya que se incorporaron al texto disposiciones sobre transferencias de fondos por el financiamiento educativo y por obras menores. También la norma ordena priorizar la regulación de la deuda flotante.
Más allá de las extensas reuniones del miércoles donde se tejió el acuerdo entre diputados, senadores y el foro de intendentes y presidentes comunales del justicialismo, el debate en el recinto de Diputados se extendió durante más de tres horas. Desde distintos sectores de la oposición se insistió en cuestionar el alto nivel de gasto de la administración del Frente Progresista planteando en algunos casos escenarios apocalípticos. En tanto, el oficialismo insistió en señalar que la autorización está prevista en normas provinciales como la ley de administración e hizo notar que son ya la mayoría de las provincias argentinas las que han recurrido a ese instrumento en razón del achicamiento de los fondos federales hacia el interior.
Los bloques del Frente Progresista, el macrismo, la mayoría de los peronistas federales y la mayoría de los justicialistas conformaron los 35 votos positivos que tuvo el texto. Fueron ocho los justicialistas que se abstuvieron de votar (Lacava, Obeid, Mirabella, Bielsa, Panella, Di Bert, Daniele y Abello) y votaron rechazando el proyectos los tres legisladores de Ciento por Ciento Santafesino y la peronista federal Miriam Cinalli. En cambio, en el Senado hubo unanimidad de criterios.
Alcances y dichos
Diputados respetó la cifra autorizada por el Senado de permitir la toma de hasta 556.365.000 de pesos mediante la emisión de Letras que hará el Nuevo Banco de Santa Fe que ganó una compulsa ya realizada por el gobierno con otras cuatro entidades. La devolución se deberá realizar antes del 30 de noviembre. En el texto, se ordena al Ejecutivo a devolver los fondos retenidos por la ley de financiamiento educativo mientras que los montos devengados hasta el 31 de mayo se transferirán en 6 cuotas iguales y consecutivas antes de fin de año. También determina que después de los 60 días de emitidas las Letras se deberá saldar la deuda de obras menores. La ley además obliga al Poder Ejecutivo a presentar en forma mensual estados demostrativos de la ejecución del presupuesto fijándole una serie de requisitos a cumplir en lo que hace a recursos y a erogaciones.
El socialista Raúl Lamberto y los radicales Julián Galdeano y Santiago Mascheroni fueron encargados de defender la postura del Poder Ejecutivo. Silvia De Césaris, Ricardo Olivera, Héctor Acuña y Darío Mascioli explicaron el voto positivo de sectores justicialistas no sin efectuar críticas a las políticas oficiales. Fernando Angelini hizo lo propio desde el Pro mientras que María Eugenia Bielsa, Mario Lacava y Roberto Mirabella justificaron su abstención, no sin efectuar críticas al estado de las cuentas de la provincia.
“Votamos responsablemente pero se necesita una seria autocrítica del Poder Ejecutivo y una revisión del gasto que se les ha escapado de las manos” advirtió De Césaris. Bielsa enfocó las críticas en el ministro de Economía, Angel Sciara y cuestionó el gasto superfluo expresado en gabinetes paralelos. Para Lacava, fue la profecía autocumplida ya que en diciembre advirtió su sector de lo que venía al votarse un reconocimiento de un déficit de 1.400 millones para el ejercicio 2011. Olivera expresó su voto a favor por los intendentes y presidentes comunales no sin antes calificar de “irresponsable” el manejo de la cosa pública por parte del gobierno. Mirabella advirtió que la “estructura creada por el Frente Progresista es de imposible pago. El problema no son los ingresos, sino el gasto público”. Acuña, a su turno, aclaró que después de las Letras se viene la reforma fiscal y luego el pedido de endeudamiento externo si no se pone coto al gasto. Mascioli dijo votar “por la gente y la política” y destacó que “somos los peronistas los que le damos las herramientas para continuar las obras públicas”.
En cambio, Germán Kahlow (Ciento por Ciento Santafesino) explicó que el voto era negativo “porque no queremos ser responsables ni cómplices de esta situación”.
Lamberto aclaró que las Letras “son un instrumento habitual, normal para el funcionamiento del Estado. No son pecaminosas” advirtió. Galdeano se detuvo en la situación de las distintas provincias argentinas para aclarar que “Santa Fe no es una isla”.
Ya sobre el final, Mascheroni llamó a mirar la cuenta de inversión e hizo una serie histórica de la relación de deuda con recursos de la provincia. En el año 1999, la deuda era el 38% de los recursos; en el 2003 llegó al 64; en el 2007 al 18,9% cifra que se repitió en el último ejercicio. “Al menos que estos datos objetivos sirvan para atenuar los garrotazos” remató el radical.
Dichos y hechos
Ya estaba en sus últimos minutos la discusión del tema Letras cuando pidió la palabra el diputado radical Darío Boscarol y en base a un artículo publicado el 24 de abril último en el diario El Litoral le pidió explicaciones al diputado Khalow (Ciento por Ciento Santafesino) quien dijo tras la aprobación del tema en el Senado que “había 100 millones de razones para sospechar” del tratamiento. Cabe señalar que la Cámara Alta agregó esa cifra al pedido del Ejecutivo sobre emisión de los títulos.
“Ese tipo de sospechas no hacen bien. Me gustaría saber si las extiende a esta cámara. No es justo que los senadores del radicalismo estén bajo esa sospecha. ¿Cuál es la cuestión rara que está pasando?, le preguntó.
Khalow aclaró que “no quiso ofender a Boscarol ni a ningún legislador ni a nadie que forma parte de la vida política santafesina. Pido disculpas” añadió el legislador quien además había cuestionado el trámite “rápido y fugaz” que tuvo el asunto en el Senado.
Además
Diputados dio media sanción a otros dos proyectos de ley. Por unanimidad al del radical Galdeano para permitir que municipios y comunas tengan un nuevo plazo para comunicar a la API en el caso de que necesiten emitir una sexta cuota de patente única sobre vehículos.
En tanto, con el voto de las bancadas justicialistas y de la Unión Pro Federal, y el rechazo del Frente Progresista, se aprobó un texto ordenador del llamado fondo de obras menores. Entre otros aspectos ordena la transferencia mensual de recursos y autoriza a disponer del 50% de esos recursos para gastos corrientes.