“Somos empleados del club, no elegimos los momentos, estamos preparando el equipo para que podamos colaborar de la mejor manera. Nos pidieron ante la salida de Pablo Lavallén que nos hagamos cargo y acá estamos”, dijo otro Pablo, en este caso Bonaveri, quien es el entrenador de la Reserva de Colón, pero que hoy, momentos antes de las 21, aparecerá por la boca del túnel del estadio Julio Humberto Grondona como director técnico del plantel superior sabalero.
El compromiso que afrontará de visitante el equipo rojinegro será frente a Arsenal, para cumplir con el postergado de la 13ra. fecha de la Superliga, que en su momento no se jugó por estar el plantel colonista en Asunción del Paraguay, viviendo el hito más importante de su historia futbolera, protagonizando la final de la Copa Sudamericana 2019 frente a Independiente del Valle de Ecuador, que finalmente se consagró campeón del segundo certamen de importancia de Sudamérica, detrás de la Copa Libertadores.
Precisamente, la eficiente participación de Colón en dicha competencia, hizo que el técnico, Pablo Lavallén, tenga un “plus” como para continuar al frente del equipo, a pesar de no haber mostrado grandes rendimientos en la mayoría de los partidos disputados, no sólo en la Sudamericana sino también en la Superliga y en la Copa Argentina, los tres certámenes en los que en su momento Colón estuvo disputando simultáneamente.
De todos modos, al perder la Final Única en La Nueva Olla (también había quedado eliminado increíblemente de la Copa Argentina por Estudiantes de Buenos Aires), a Lavallén le quedó poco crédito. Sólo quedaba “luchar por sumar la mayor cantidad de puntos posibles”, palabras textuales del entonces entrenador sabalero.
Pero eso tampoco ocurrió de la manera pensada, ya que de los últimos cinco partidos disputados por el campeonato casero, Colón sólo ganó uno, contra Estudiantes en el Brigadier López (3-2), en el “sandwich” de cuatro caídas: River en el Monumental (1-2), Atlético Tucumán en el Centenario (0-2); Vélez en el Amalfitani (1-3) y Aldosivi en el Cementerio de los Elefantes (0-2).
Justamente este último revés fue lo que precipitó la renuncia de Lavallén, cuando el “trato” entre él y la dirigencia era que dirigiría al equipo hasta el compromiso contra Arsenal y que luego sí se iría, al haber rescindido el contrato entre las partes.
Por esta razón es que Pablo Bonaveri se hizo cargo interinamente para orientar al equipo en su visita al Viaducto, para enfrentar a este siempre complicado Arsenal, ahora agrandado futbolísticamente de la mano de Sergio Rondina, con quien el equipo sumó 24 puntos, producto de siete victorias y tres empates, perdiendo cinco cotejos.
“De Arsenal hemos estudiado bastante, es un equipo muy sólido, tiene 24 puntos, juega 4-3-1-2, con Giménez suelto, hacen un triángulo en el medio, va a jugar Méndez por Piovi, meten dos puntas arriba y los laterales suben bien por afuera y se sostienen en el trabajo de los centrales. Conocemos el posicionamiento que tienen en la cancha y el juego”, señaló Bonaveri el martes en el contacto que tuvo con la prensa.
Será la primera vez del joven director técnico al mando del plantel de primera. Pero ya ha tenido su experiencia no hace mucho tiempo y en circunstancias (léase motivos) parecidas, cuando en marzo de este año asumieron Marcelo Goux y Pablo Bonaveri para hacerse cargo tras el alejamiento de Luis Comesaña, antes de que llegara Pablo Lavallén. A la dupla de entrenadores les tocó dirigir al equipo contra Racing, escapándosele el triunfo por poco, ya que ganaba Colón con el gol de Morelo a los 32 minutos del primer tiempo; pero a los 43 del segundo, Cvitanich puso el 1-1 con el que terminó el partido jugado en el estadio Brigadier López.
Ahora a Pablo le tocará reemplazar a Pablo. Bonaveri será el DT (junto al hijo de “Pancho” Ferraro, Ariel) “bombero” en lugar de Lavallén, que renunció luego de la lamentable (por la imagen que dejó el equipo) derrota ante Aldosivi. El objetivo para esta noche está claro, despedirse del torneo con el mejor aspecto posible, y si se puede sumar la mayor cantidad de puntos sería ideal, ganarle al agrandado Arsenal en su reducto sería lo máximo.
A propósito del encuentro de hoy a las 21 ante Arsenal, Bonaveri armó un equipo sin la presencia de Luis Miguel Rodríguez, quien presenta una contractura y no viajó junto a la delegación.
Algo de esto dijo el técnico cuando habló el martes al mediodía y señaló que “algunas cuestiones las voy a resolver mañana (por ayer) porque necesito ver la evolución de algunos jugadores que no voy a nombrar pero no están bien”. Uno de ellos, precisamente, era el tucumano.
Después, en el entrenamiento, el DT interino planteó tres equipos diferentes, pero el que en definitiva jugaría ante Arsenal formaría con Leonardo Burián; Gastón Díaz, Emmanuel Olivera, Guillermo Ortiz y Gonzalo Escobar; Alex Vigo, Fernando Zuqui, Marcelo Estigarribia y Christian Bernardi; Braian Galván y Wilson Morelo.
Así, se produciría el regreso de Ortiz a la titularidad, en reemplazo de Schmidt; la aparición de Gastón Díaz como marcador lateral derecho, lo cual permitiría que Vigo pase al mediocampo (lugar en el que muchos lo ven en un futuro no muy lejano) para reemplazar a Lértora, que llegó a las cinco amarillas y cumplirá la fecha de suspensión en este encuentro, y juegue entonces por la izquierda Bernardi; y arriba, Galván jugaría de mediapunta en lugar del “Pulga”, que no se recuperó de esa molestia en la zona del aductor de su pierna izquierda.
Como era de suponer, el técnico sabalero apostará a un 4-4-2 aunque se sabe que Braian Galván no es punta neto sino que le gusta jugar retrasado, por lo que seguramente se parará como enganche, tratando de tener llegada por los laterales a través de Vigo y de Bernardi.