El Litoral | area@ellitoral
El Municipio recordó las normativas existentes sobre el tema. El objetivo es la correcta preservación de los ejemplares existentes a lo largo y ancho de la ciudad. También destacaron los beneficios que reviste el resguardo de las especies locales.
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En Santo Tomé recordaron que se encuentra terminantemente prohibida la intervención particular sobre el arbolado público, ya sea para la poda, extracción, corte de raíces o plantación de ejemplares en la vía pública. Así lo establecen las ordenanzas Nº 1.125/84 y Nº 2.309/02 del Código Municipal de Preservación Forestal, y la Ley Provincial Nº 9.004. Desde la Oficina Municipal de Arbolado Público y Áreas Naturales de la Municipalidad, remarcaron que es obligatoria la previa inspección y autorización municipal para la realización de estas tareas. Asimismo aclararon que el volumen de restos vegetales a depositar en la vía pública nunca debe exceder de un metro cúbico.
Cabe aclarar que los infractores serán pasibles de las multas previstas en el Código Municipal de Faltas. Es por eso que aquellos interesados en efectuar algún tipo de intervención deben descargar el formulario correspondiente por duplicado en la página web www.santotome.gov.ar (sección Trámites) y presentarlo en mesa de entrada del Palacio Municipal. También pueden requerirlo personalmente en la nombrada dependencia, ubicada en calle Maciá 1933.
Presencia favorable
Otro punto que marcaron refiere a los beneficios del arbolado público, es decir a aquellos ejemplares que se encuentran en veredas, plazas, parques, instituciones, paseos o cualquier otro espacio destinado al uso común. Dentro de las zonas urbanas, la presencia de árboles mejora la calidad ambiental, traduciéndose en ventajas como la producción de oxígeno y la absorción de dióxido de carbono, la reducción del volumen de agua ocasionada por precipitaciones, la disminución de la contaminación visual y sonora, el sostenimiento de la biodiversidad y la contribución a una buena calidad del aire. Por todas estas bondades, el municipio ponderó la importancia de pedir el asesoramiento a la administración al momento de elegir alguna especie.
Por ejemplo, existen ejemplares como los lapachos de avenida Luján que a fines de cada invierno tiñen de rosado la ciudad con su vistosa floración. Una incorrecta elección del tipo de árbol puede traer inconvenientes a mediano o largo plazo, tales como daños en las veredas o construcciones, interferencias con el tendido de los servicios públicos (aéreos o subterráneos), los cuales deben corregirse posteriormente con podas o la remoción misma del ejemplar. En este sentido, no es recomendable para el arbolado de alineación especies como sauces, palos borrachos, kiri, ficus, palmeras, coníferas, álamos y eucaliptus, entre otras.