El Litoral
Se ofuscó con un mal pase de un compañero. Los árbitros cobraron falta técnica en su contra.
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LeBron James tuvo su momento de furia en la última presentación de Cleveland en un nuevo partido de la NBA.
La figura de los Cavs se enojó con un compañero que no pudo concretar un pase. Entonces, se ofuscó y salió de la cancha. Permaneció unos segundos sentado en el banco y luego volvió. Los árbitros, haciendo cumplir el reglamento, cobraron falta técnica en contra de James.
"Le pido perdón a mis compañeros por lo que hice", manifestó tras el partido.
El partido finalmente terminó en victoria para Cleveland por 109-97 y LeBron con 19 puntos, 11 rebotes y ocho asistencias.