Opinión: OPIN-09

Opinión


Cartas a la dirección


Tango I

Señores directores: El nuevo viaje al exterior del presidente de los argentinos, con su esposa y numerosa comitiva (esta vez a España), traen a mi memoria la imagen del avión "Tango I", tan criticado cuando fue adquirido y cuya venta fue parte de la agresiva campaña de la Alianza para llegar al poder.

Me sorprende que mientras con el anterior gobierno lo primero que aparecía en todos los medios, era el presidente subiendo y bajando del "Tango I" e incluso se filmaba su aterrizaje, hoy ese nombre (el del avión) casi ni figura, como si existiera vergüenza por parte del periodismo ante tamaña mentira del pasado. Para disimular un poco, un funcionario del gobierno nacional llegó al colmo decir que ahora (el avión) sería convertido en una "oficina de trabajo" y no como era antes (no recuerdo el término agraviante que dio).

Como argentino mucho me satisface y enorgullece que el señor presidente viaje en ese avión, que nos da jerarquía y representatividad. Lo que me molesta sobremanera es la mentira y hubiera sido un gesto muy digno y también comprendido por todos, si el Dr. De la Rúa o algunos de sus funcionarios más inmediatos, expresara al pueblo reconocer que se equivocaron, que este medio era y es necesario, por la seguridad, representatividad, etc. Rubén Oreste Angeloni. DNI: 6.310.573. San Justo.


Desilusionado

Señores directores: Era un día cualquiera. Accidentalmente, me encontraba en la esquina noroeste de Rivadavia y La Rioja, cuando noté el ritmo habitual algo alterado pues, por la acera de enfrente y junto a su comitiva, caminaba nuestro actual presidente. Al verlo, me pareció envuelto en una aureola de hombre nuevo y sencillo; sentí una emoción muy profunda y, acercándome lo más posible, le dije: "Doctor, en usted está encarnada nuestra última esperanza. Usted es el futuro presidente de la Nación, hoy convertida en un prostíbulo por la acción de este gobierno infame", mientras en vano intentaba estrechar su mano. Creí notar en su rostro sonriente un gesto de agradecimiento, mientras se alejaba rodeado de un grupo cada vez más numeroso de simpatizantes.

Ha pasado bastante agua bajo nuestros puentes, pero estoy seguro de que la mayoría de los argentinos bien nacidos creíamos en un cambio favorable. En mis sueños visualizaba una gran cárcel, de altísimos muros, donde, con trajes a rayas horizontales, habitaban todos los notorios personajes del menemato y, entre todos ellos, destacándose por la elegancia con que lucía el atuendo, don Carlos Saúl Menem. Pero los sueños, sueños son. Y en este horrible despertar, veo que los miserables corruptos que todo lo enlodan siguen con la misma impunidad de antes. Que el dinero de todos va a parar a los insaciables bolsillos de siempre. Que el cholulismo y la vanidad siguen siendo el distintivo de la ralea maldita de siempre. Que siguen dilapidándose fortunas, robadas al Estado, para ser gastadas en fastuosas propiedades o en viajes increíbles con señoras o señoritas de dudosa moralidad, o en regalos también increíbles. Por todo esto, señor presidente De la Rúa, cuando al despertar veo su rostro de hombre bueno y sencillo, me doy cuenta de que sólo es una máscara, y se esfuma en mí la última esperanza de una Patria mejor. José Conrado Toscano. DNI: 6.235.008. Ciudad.