Un abogado que llamó al teléfono celular de Mariano Perel horas antes y después de que fuera asesinado declaraba hoy ante la fiscal de Dolores, María Claudia Castro, quien investiga el doble crimen de Cariló.

Se trata de Fernando Sabransky, hijo de un fallecido abogado que intervino como mediador en el arreglo extrajudicial al que llegó Perel con los directivos del Banco Mercurio en plena etapa de la investigación que llevaba adelante el juez en lo penal económico Julio Cruciani.

El testigo comparte un estudio jurídico con su hermano, Marcelo Sabransky, quien actualmente lleva adelante los trámites sucesorios de los Perel por encargo de sus descendientes, informaron fuentes judiciales.

Por tal motivo, probablemente Fernando Sabransky concurra a los tribunales de Dolores junto a su hermano, quien telefónicamente adelantó en la fiscalía su intención de ver algunas fojas del expediente que pudieran resultar de interés para la sucesión.

Para realizar la sucesión no es necesario otro documento más que el acta de defunción de las víctimas. Pero si se desea hacer algún otro tipo de trámite, por ejemplo cobrar un seguro de vida, será necesario esperar una resolución de la fiscalía respecto del hecho.

Igualmente, fuentes del caso dijeron a Télam que hasta ahora no existe en el expediente ningún documento que indique que los Perel estaban asegurados.

La existencia del testigo llegó a oídos de la fiscal Castro luego de que los detectives analizaran los llamados telefónicos realizados y recibidos en uno de los celulares de Perel.

Fernando Sabransky, indicaron las fuentes, llamó al ejecutivo el sábado 3 de febrero a la tarde desde un teléfono fijo, aunque no logró hablar con él.

El lunes siguiente, cuando los cadáveres de los Perel ya estaban en la morgue de Mar de Ajó, Sabransky realizó un segundo llamado al celular del ejecutivo y dejó un mensaje en el contestador automático en el que anunció que volvería a comunicarse más tarde. Télam.