La organización del Rally de Catalunya, nueva fecha del Mundial de la especialidad que se disputa entre los días 23 al 25 de marzo, adoptará una serie de medidas de prevención para evitar que los aficionados que acudan a ver la carrera puedan propagar la fiebre aftosa.
El sindicato ganadero Unió de Pagesos se reunió ayer con el organizador de la competencia, el Real Automóvil Club de Catalunya (RACC), y con el Departamento de Agricultura de la Generalitat con la intención inicial de solicitar la suspensión de la prueba ante el riesgo de propagación de la fiebre aftosa.
Durante la reunión las diferentes partes consensuaron una serie de medidas de prevención ante la llegada a España de simpatizantes de países con riesgo de contagio, como Inglaterra o Francia.
De este modo se impedirá que el público acceda al tercer tramo de la primera etapa, conocido como La Trona, que transcurre por una zona con numerosa presencia de explotaciones ganaderas.
También se instalarán alfombras desinfectantes en los caminos rurales por los que transita la gente y las basuras se recogerán de forma inmediata para ser incineradas.
El RACC asumirá los costos de estas medidas especiales, a las que se sumará un mayor control en la frontera española para garantizar la desinfección del virus de la fiebre aftosa.
