Política: POLI-07

Senado: a un año de la denuncia de sobornos

Cafiero tiene esperanzas de que se llegue a la verdad. Cree que la posibilidad de probar los sobornos es casi total.


A un año del escándalo por los supuestos sobornos en el Senado, el legislador justicialista Antonio Cafiero consideró que el polémico caso "políticamente es cosa juzgada" pero manifestó sus "esperanzas de que se llegue a la verdad" en la investigación judicial, que lleva adelante el juez federal Gabriel Cavallo.

"En lo político el tema está probado; la posibilidad de que existieron sobornos es casi total. Porque no puede renunciar el vicepresidente repitiendo los argumentos que yo dije, ni pueden dimitir los titulares de los bloques, varios ministros, el jefe de la Side...", sostuvo Cafiero.

Para el veterano senador, "existen muchos más indicios graves, precisos y concordantes en la causa por los sobornos que en la causa en la cual se procesa a Carlos Menem", detenido por el juez que investiga la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia.

En una entrevista publicada por Clarín, el senador dijo que "una conmoción tan grande no se explica. Políticamente es cosa juzgada".

Las denuncias por presuntos sobornos en el Senado salieron a la luz hace un año, cuando Cafiero le comunicó sus sospechas al ex presidente del bloque justicialista, Augusto Alasino.

La "bola de nieve" fue creciendo hasta arrastrar al ex vicepresidente Carlos Alvarez; al jefe de la Side, Fernando de Santibañes, y a los ministros de Trabajo, Alberto Flamarique, y de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, entre otros funcionarios.

Ni siquiera el primer juez de la causa, Carlos Liporaci, se salvó y debió dejar su cargo. Pero las pruebas, supuestamente insuficientes, no dieron paso a ninguna detención.