Regionales: REGI-01

Laguna Paiva espera una salida
a la crisis de la cooperativa

Alejandro Villar. POSIBILIDADES. El gobierno nacional pagaría con bonos lo que le debe a la empresa, y la cooperativa entraría en una línea de obras que implementaría la Secretaría de Transporte.

Los ex talleres ferroviarios son hoy la principal fuente laboral. La Nación le debe más de 2 millones en concepto de reparación de vagones. Los operarios no cobran sus salarios desde hace varios meses. El problema repercutió en el comercio.


Laguna Paiva (De nuestra agencia).- La crítica situación que pone en riesgo a la Industrial Laguna Paiva Cooperativa de Trabajo, Producción y Servicios Laguna Paiva Limitada, principal fuente laboral de esa ciudad de La Capital, se podría revertir parcialmente con el pago de la deuda de los más de 2 millones de pesos que el gobierno nacional mantiene con la empresa.

Esta regularización podría concretarse por medio de una línea de bonos que sería destinada, prioritariamente, al pago de haberes atrasados al personal y a los proveedores.

En el mediano plazo, la cooperativa también estaría en condiciones de obtener recursos de una línea de obras que la Secretaría de Transporte implementaría, por un monto de alrededor de 15 millones de pesos, como parte del cumplimiento por parte del Estado del contrato de concesión. Esa suma, además de ser destinada a la reparación de vagones, vías y locomotoras, se convertiría en una posible salida a la situación que enfrenta la industria.

En cuanto a los restantes aportes que el gobierno central debe efectuar de acuerdo con lo establecido en el aludido contrato de concesión, resulta impostergable, previamente, el reordenamiento de la sociedad que tiene a su cargo la explotación del ex Ferrocarril Belgrano.

En correspondencia con esto último, directivos de la cooperativa local, acompañados por funcionarios del gobierno provincial, se entrevistaron en España con distintos grupos empresarios para lograr líneas de financiamiento y de gerenciamiento que permitan llevar adelante la reestructuración del Belgrano Cargas.

A la par de cerrar el ejercicio del pasado año con un importante déficit, la empresa ferroviaria sólo cuenta actualmente con 25 locomotoras con regularidad operativa, de las 68 que recibió al momento de hacerse cargo del servicio.

Los motivos


De acuerdo con la información recogida por este diario, la situación por la que está atravesando la cooperativa obedece a varios factores que impactan tanto en su capacidad operativa como en los proyectos previstos por la misma para el mediano y corto plazo.

Uno de ellos está representado por la crisis económica por la que está pasando el país, que ha afectado las expectativas que se habían depositado en un rubro no tradicional que incorporó esta ex dependencia ferroviaria para asegurar su crecimiento y afianzamiento como fuente de trabajo: la actividad metalúrgica.

Para participar con éxito en el sector, la empresa realizó importantes adquisiciones de máquinas y herramientas y capacitó a su personal con el fin de ir ganando mercados sobre la base de una probada competitividad en el ramo que incursionaba.

Sin embargo, pese a los logros obtenidos en una primera etapa, la situación económica del país contrajo severamente las demandas y los ingresos provenientes de ese sector, perjudicándola en la consolidación progresiva de las metas propuestas y, de manera especial, en el retorno de lo invertido en concepto de material y horas hombre, para hacer frente al pago a los proveedores y al propio personal, que lleva un atraso de varios meses en sus haberes.

El Belgrano Cargas


Otro hecho es la problemática suscitada en el Belgrano Cargas SA, tanto debido a la falta de pago a la cooperativa por la reparación de vehículos, como por la decisión de su principal accionista, la Unión Ferroviaria -dueña del 51 % de las acciones-, de dejarla fuera de la sociedad que se había formado para concesionar esa línea, argumentando incumplimiento del contrato firmado oportunamente con ese fin.

Esto último ha sido rechazado por la empresa local que se puso en marcha en 1993, a partir de la privatización del ex taller de reparación de vagones, iniciando el reclamo correspondiente por la vía judicial.

A lo expuesto se suma el importe de 2,1 millones de pesos que el gobierno le debe en concepto de la reparación de vagones que le encargó antes de entregar al citado ferrocarril en concesión. Esta deuda, junto con la anterior, ha llevado a la cooperativa a un cuello de botella que, además de dificultar la instrumentación del plan de trabajo trazado, afecta el poder adquisitivo de sus trabajadores, trasladando las consecuencias a la estructura socioeconómica de las comunidades donde opera: Laguna Paiva y San Cristóbal.

El comercio en una encrucijada


La situación de la Industrial Laguna Paiva Cooperativa de Trabajo, Producción y Servicios Limitada también se trasladó al comercio local, lo que motivó a las autoridades del Centro Comercial e Industrial a invitar a los directivos de la empresa a una reunión, con el fin de conocer detalles sobre la problemática que atraviesa la firma.

El presidente de la cooperativa, Omar Vázquez, y el secretario del consejo de administración, Roberto Olmos, participaron del encuentro junto al intendente Ricardo Gudiño, autoridades y asociados del Centro Comercial.

Al término de la reunión, la entidad convocante dio a conocer un comunicado en el que plantea la encrucijada en la que queda frente a sus representados porque, por un lado, debe pedirle a los comerciantes que "sigan asistiendo a sus clientes -los trabajadores de la empresa en cuestión- como lo vienen haciendo desde hace 5 meses, con el riesgo que ello implicaría: acrecentar la deuda ante sus proveedores, descubiertos en los bancos con altas tasas de interés, descapitalización, posible cierre de sus negocios; o sea, extender al comercio la crisis que hoy soportan 150 obreros, sin que se vislumbre, a través de las reuniones sostenidas hasta la fecha con los dirigentes, una solución inmediata o mediata del conflicto".

Por otro lado, "cortar el crédito a esta empresa y, por consiguiente, a sus asociados, para no ser arrastrados por sus dificultades, ya que vemos que desde el cambio de gobierno nacional se ha visto una caída constante de su funcionamiento, a punto de llegar adonde nos encontramos: un gobierno nacional indiferente a los reclamos, sin una política ferroviaria concreta y un conflicto que enfrenta a la cooperativa local y al Belgrano Cargas SA, que sería su principal cliente".

El futuro


Posteriormente, la entidad se pregunta sobre el futuro de la cooperativa, que continuará ligada a la reparación de vagones de cargas o de pasajeros, sin "los comprometidos subsidios que a nivel nacional les eran otorgados por el anterior presidente de la Nación (Carlos Menem), a través de las manos de José Pedraza (titular de la Unión Ferroviaria)".

"Ante esta encrucijada, las instituciones deben mancomunar esfuerzos para buscar, a la par de una solución al problema planteado, nuevos emprendimientos para no estar tan dependientes de lo que en los últimos años fue la principal fuente de divisas de la comunidad", concluye el comunicado.