Sucesos: SUCE-01

Huelga de hambre en Coronda

Archivo. BOCA CERRADA. Entre otras cosas, los reclusos reclaman que los pedidos de traslado sean tratados con mayor rapidez.

Más de 60 presos cosieron sus bocas para exigir mejores condiciones de vida. Quieren ver más televisión y estar con sus familiares los sábados en lugar de los jueves, entre otras cosas. La medida comenzó ayer por la mañana.


Prácticamente la totalidad de los presos alojados en el nuevo pabellón 12 de la cárcel de Coronda realizan desde la mañana de ayer una huelga de hambre. Esta vez, 61 de ellos se cosieron la boca.

Se trata de los internos con "mala y pésima conducta" que hasta hace poco tiempo tenían sus celdas en el siempre violento y cuestionado pabellón 5, según revelaron hoy fuentes del Servicio Penitenciario.

Los reclusos reclaman "mejoras" en sus condiciones de detención. El director del Servicio Penitenciario provincial, Arturo Gandolla, puntualizó que -especialmente- apuntan al régimen de visitas, al horario en que pueden ver televisión y al recreo.

  • Régimen de visitas: pretenderían que pase del jueves al sábado y tener dos horas más.
  • Televisión: actualmente miran TV desde las 20 hasta las 22 y quieren que el horario se prolongue hasta las 23.
  • Recreo: desean salir todos juntos al patio en lugar de por partes, como lo hacen ahora.Además, expresaron la necesidad de que se dé rápida respuesta a los presos que soliciten traslado para estar más cerca de sus familiares.Gandolla y el director del penal corondino, Carlos Evaristo González, dialogaron esta mañana con los delegados del pabellón, pero no llegaron a un acuerdo. "Primero deben terminar con la medida y luego vamos a ver qué podemos hacer. Nosotros queremos que los detenidos tengan conciencia de que sus reclamos son derechos que oportunamente fueron adquiridos y, como consecuencia de sus propias conductas, ellos los perdieron", destacó el funcionario provincial.Por otra parte, la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC) señaló que "el sistema impuesto en el pabellón 12 (de disciplina) es perverso", ya que -advirtió- "mientras el discurso oficial dice que se trata de la reinserción social de los reclusos, las sanciones los obligan a convivir encerrados y sin posibilidades de tener contacto con el exterior".El nuevo episodio se suma a la gran lista de hechos similares ocurridos en lo que va de 2001. Huelgas de hambre y trabajo, evasiones y hasta un espectacular intento de fuga (a través de un túnel) azotaron en los últimos meses a la penitenciaría corondina.