Pantallas y Escenarios: PAN-03

De soledades y desencantos


Cómo una joven, en medio de su desasosiego, de su íntima soledad, va descendiendo a sus propios infiernos interiores, es lo que Carine Adler va delineando en Under the skin, su ópera prima. La trama tiene como escenario esos ámbitos proletarios que el cine inglés (con Ken Loach a la cabeza) suele frecuentar, pero esencialmente se concentra en la compleja sensibilidad de la muchacha. Y lo hace a partir del momento en que junto a un episodio familiar, de alguna manera conmocionante para ella (la muerte de su madre), también hacen eclosión sus conflictos, sus angustias y tormentos.

La personalidad de la joven es permanentemente contrastada con la de su hermana, que también sufre por esa misma pérdida, aunque su actitud es diferente; claro, su propia realidad también lo es: tiene consigo el sustento de una familia (su marido, un hijo por nacer, un hogar...), lo que suele ser fundamental a la hora de hacer más soportables los momentos de dolor y desazón.

El filme indaga persistentemente en un temperamento femenino, en la degradación progresiva a la que se somete una mujer (como de alguna manera lo hacía Polanski en Repulsión, aunque con un caso más cercano a la demencia) en medio de su propio caos, de su desorden existencial y emocional. Algo que Carine Adler plantea sin subterfugios, apelando mas bien a una cierta contundencia expositiva, mostrando a su personaje en constante pugna con un contexto donde, además, abundan mezquindades y pasiones muchas veces aviesas.

Y para ello contó con contribuciones muy ajustadas, como la iluminación de Barry Ackroyd, el montaje de Ewa J. Lind o las interpretaciones de Samantha Morton en la caracterización protagónica o la más episódica de Rita Tushingham, la misma que supo ser una de las musas del Free Cinema.

"A flor de piel"


"Under the skin" (Inglaterra, 1977).

Dirección y guión: Carine Adler.

Fotografía: Barry Ackroyd.

Música: Ilona Sekacz.

Elenco: Samantha Morton, Claire Rushbrook, Rita Tushingham, Stuart Townsend, Christine Tremarco y Matthew Delamere.

Duración: 82'.

Presentada en el América.

Roberto Lapalma