El presidente electo de la comuna de San José del Rincón, Mario Facino, se refirió a la actual gestión para explicar la crítica situación económica por la que atraviesa la localidad costera; al tiempo que prometió que trabajará "a la par de los empleados" para poder revertir el panorama, cuando asuma el cargo el próximo 11 de diciembre.

Como se sabe, en la segunda mitad del año se agravó el conflicto con los agentes comunales, quienes por la falta de pago de sueldos llevaron a cabo sucesivas medidas de fuerza que dejan a los vecinos sin la prestación de servicios elementales.

Mes a mes, los números de la comuna son más rojos, y entre los habitantes y empleados comunales hay preocupación sobre el futuro. ¿Cómo podrá enfrentar la angustiante situación la nueva comisión que se hará cargo de la comuna?, fue el interrogante que intentó abordar, precisamente, la extensa entrevista que mantuvo El Litoral con Facino.

El futuro titular de la comuna costera recordó sus anteriores gestiones consecutivas entre 1995 y 1999, durante las cuales se elevó el número de los agentes comunales, que hoy en día totalizan 103 en planta permanente.

"Hacían falta. Hay parámetros a nivel internacional que establecen un empleado comunal por cada 100 habitantes, y cuando yo dejé la comuna, Rincón ya contaba con más de 12 mil habitantes. Además, lo único que hice fue legalizar la relación contractual de esos agentes que ya se desempeñaban como personal eventual, lo cual no significó gastos extras para la comuna", dijo.

Durante la charla, Facino habló de "anomalías" y de "gastos desmesurados" para calificar a la actual gestión encabezada por Silvio Mendoza y para detectar las razones que llevaron a la crítica situación financiera de la comuna, minimizando incluso la actual crisis del país.

Para ello se basó en las ordenanzas dictadas por Mendoza y por el informe -ambos exhibidos a El Litoral- que realizó el personal técnico contable del gobierno provincial sobre las cuentas comunales, tras la renuncia de la comisión revisora de cuentas, ocurrida casi un año atrás.

"Yo dejé a la comuna con cuentas claras. Cuando asumió esta gestión lo primero que se hizo fue declarar la emergencia económica y crear una gabinete político, con un sueldo de 3.600 pesos para el presidente comunal", dijo.

Facino recordó que la Ley de Municipios y Comunas establece que "sólo puede cobrar un sueldo el presidente comunal, y no así el resto de la comisión, que debe trabajar ad honorem. Pero acá se crearon secretarías de Acción Social, de Hacienda y de Cultura con sueldos de entre 500 y 1.100 pesos", agregó.

Por eso, adelantó que una de las principales medidas a tomar será "dejar sin efecto" dichas ordenanzas que posibilitarán "un ahorro de más de 100 mil pesos por año. Yo no voy a tener un sueldo. Tampoco el resto de la comisión. La prioridad la van a tener los empleados", prometió.

Al abundar sobre las acciones a encarar, Facino utilizó la palabra "ajuste" en el sentido de reducir los gastos en los tres rubros que, de alguna manera, reflejan los gastos de la comuna y que corresponden a alquileres, honorarios a terceros y combustibles.

En mis gestiones se gastó 82.400 pesos por año, contra los 155 mil pesos que se utilizaron el año pasado", remarcó.

Tras reconocer que la deuda con el Fondo de Asistencia Educativa (FAE) es una de las más abultadas y difícil de saldar para la comuna, Facino resaltó el "mal manejo" de la actual gestión, respecto de la falta de orden de las cuentas.

"Los egresos no se encuentran ordenados. Se utilizan biblioratos mensuales de recibos y otros de orden pago, pero los recibos no siempre están firmados por los beneficiarios, y la mayoría de las órdenes de pago están rubricadas sólo por la tesorera. Algunas no tienen anexadas las documentación que dio origen al egreso, y otras son de un monto mayor a la factura que se adjunta", dijo al citar el contenido del informe contable.

Al hablar sobre las tensa relación de los empleados con la comisión, Facino auguró que "eso va a cambiar porque yo confío en ellos y estoy seguro de que vamos a trabajar a la par para conformar a los vecinos de Rincón", aunque reconoció que los primeros meses "van a ser muy duros".

Tras vaticinar que "no habrá huelgas", Facino también negó que se aplique un mecanismo agresivo para el cobro de impuestos. "A lo sumo vamos a sugerir a los vecinos que paguen el último impuesto, y después aplicaremos descuentos en los intereses para las obligaciones atrasadas".

También, señaló que atendiendo a la difícil situación de la provincia "no se solicitará dinero" pero "sí máquinas para prestar los servicios, mientras se reparen las nuestras. También pediremos la reprogramación de deudas para empezar a pagar a los proveedores".