Ayer por la tarde llegó al Hogar Casa Cuna Atanasia Durán la resolución firmada por el intendente de la ciudad, Arq. Marcelo Ignacio Alvarez, tan temida. Fechada el 28 de noviembre, la resolución N° 576 insta a desocupar el predio del parque Alberdi concesionado por más de 20 años a Casa Cuna y por lo tanto fuente de ingresos.

Por la misma se resuelve "proceder al dictado de la norma que revoque la concesión otorgada, exigiendo que en un plazo de 72 horas se entregue el espacio libre de ocupantes y ocupación, y en caso de que la concesionaria no cumpla lo ordenado, se autoriza a la Fiscalía Municipal y a la Dirección de Control y Abastecimiento a realizar el desalojo administrativo de las instalaciones".

Las consideraciones que se tienen en cuenta para tal resolución señalan que las tareas de remodelación integral del parque Alberdi fueron dispuestas por ordenanza N° 10.742/2001. En otra parte, dice que "el carácter precario otorgado a la concesión, deviene importantísimo, dado que habilita a la Municipalidad y a su vez exigir la restitución del espacio público ocupado".

Más adelante asegura que "la actual concesionaria ha tomado conocimiento por los medios periodísticos no sólo de la sanción de la Ordenanza N° 10.742/2001, sino también de las labores realizadas, ya sea por administración o por terceros, de remodelación integral de la plaza".

Durante 20 años el concesionamiento del predio significó una fuente de ingresos destinados al funcionamiento de Casa Cuna. Con esta decisión municipal la entidad pierde un total de 500 pesos mensuales, "una locura", señaló Marcelo Lozano, el presidente de la institución, quien no pudo ocultar su dolor e indignación frente a las últimas notificaciones.

En mayo de 1981, el intendente de la ciudad Roberto Enrique Casís concedía en forma precaria y gratuita un sector del parque Alberdi, para que se instalaran juegos mecánicos destinados al esparcimiento de niños y sus familias. En octubre de 1987, el intendente Tomás Camilo Berdat amplió la concesión. Mientras tanto, la institución se hizo cargo del mantenimiento y cuidado del lugar.

Hoy la nueva resolución deja sin efecto las anteriores y coloca a Casa Cuna en una situación crítica. Otro golpe que se suma con el ya dado por la Secretaría de Promoción Comunitaria de la provincia, que le redujo la subvención en un casi 20 por ciento.

"Evidentemente quienes diseñan y llevan a la práctica las políticas hacia la infancia no comprenden cómo es la vida cotidiana de una institución como el Hogar Casa Cuna, ni tampoco saben que a los niños y niñas hay que otorgarles la mejor calidad de atención para revertir la compleja situación que les toca padecer", había escrito Lozano en la revista Casa Cuna, día a día frente a la decisión de Promoción Comunitaria, y lamentablemente hoy lo vuelve a comprobar.

El secretario de Gobierno de la Municipalidad atribuyó a un "problema de comunicación" el conflicto generado en torno a las obras de remodelación del Parque Alberdi, que terminaron con la concesión de los juegos y el kiosco que explotaba Casa Cuna.

Tras reconocer que pudo no haber existido una comunicación por escrito a la entidad, aclaró que el tema había sido conversado de manera informal. De todos modos, anticipó que iba a convocar a las autoridades de Casa Cuna para la semana próxima, a fin de encontrar alguna salida por vía del diálogo.

El funcionario aclaró que ambas concesiones, otorgadas en los años 80, eran "precarias y gratuitas" y que los 500 pesos que se recaudaban por su explotación constituyen una cuestión ajena a la administración municipal, aun admitiendo que para la institución representan un ingreso vital.

De todos modos, apostó a considerar alternativas, con los propios representantes de la Casa Cuna, en un encuentro que se concretará en los primeros días de la semana próxima.