El ministro de Defensa, Horacio Jaunarena, reiteró hoy que "no existe ninguna posibilidad" de que se produzca un golpe de Estado cívico-militar, como ocurrió en otras épocas de la historia argentina, porque "hay una sociedad que defiende la democracia" y "porque hay una conducción de las Fuerzas Armadas que no lo permitiría".

Jaunarena volvió a desmentir esta mañana los rumores acerca de un supuesto complot cívico-militar en contra del actual gobierno, con "algunos (sectores) que tienen una cierta tendencia al pensamiento mágico en el sentido de que va a venir alguien, algún salvador, algún profeta, alguno que tenga la solución mágica y que va a solucionar en 10 minutos los graves problemas de los argentinos".

"La realidad los desmiente permanentemente. Tuvimos una ola en enero, luego terminó porque la realidad terminó desmintiendo todos los rumores. Ahora se han instalado de nuevo y la realidad los va a volver a desmentir", señaló el ministro de Defensa en declaraciones a Radio Continental.

Jaunarena reiteró que "las Fuerzas Armadas sólo actuarán en el caso extremo de conmoción interna que pongan en riesgo la autoridad constitucional" o en tareas "secundarias", tal como lo establece la Ley de Seguridad Interior.

Ante una pregunta puntual sobre si existe posibilidad de que ante un eventual estallido social sectores cívico-militares impulsen un golpe de Estado, Jaunarena respondió tajante: "En este momento no existe ninguna posibilidad".

"Para que haya inestabilidad institucional tiene que haber dos factores", señaló el ministro y explicó: "Tiene que haber una sociedad que esté proclive a una salida fuera de las instituciones y segundo: cuando las Fuerzas Armadas tengan cierta proclividad también a una salida de ese tipo". Jaunarena aseguró que "en este momento no existe ninguna de las dos cosas: hay una sociedad con problemas, hay una sociedad que protesta, pero que está dispuesta a defender las instituciones democráticas".

Por otro lado, señaló: "Hay una conducción en las Fuerzas Armadas que tiene una firme convicción democrática y republicana y que de ninguna manera va a atender ningún reclamo que esté perdido en este tipo de planteos".

Finalmente, el ministro advirtió que una situación de ese tipo es producto de que como en otras épocas se "echa la culpa de los problemas a un solo sector", en este caso a los políticos, ante lo cual "el resto no se hace cargo de sus responsabilidades y en vez de crecer, seguimos teniendo una sociedad inmadura, que no crece y nunca deja de ser adolescente".

Por su parte, el comandante del tercer Cuerpo de Ejército, general Julio Ernesto Hang, volvió a rechazar hoy las versiones sobre la hipótesis de una posible intervención cívico-militar y pidió a quienes supuestamente impulsan esa idea, que "no nos usen como cucos ni como juguetes".

"Las Fuerzas Armadas son una institución de la Constitución. Por su poder de fuego, por su poder militar, son el último recurso de la defensa nacional, no tienen ninguna capacidad de respuesta proporcional a un problema de índole social", aseveró.

En cuanto a la situación del ex coronel Mohamed Alí Seineldín, que cumple desde hace más de once años prisión en Campo de Mayo por motorizar la rebelión de 1990 contra el entonces presidente Carlos Menem, aseguró que "mi opinión personal es que es un problema de la Justicia".

"El ex coronel Seineldín está cumpliendo una sentencia firme, lleva ya una cantidad importante de años en esa condición, es alguien que cuando era yo muy joven era un hombre de prestigio por sus dotes de soldado, pero no es un referente de la fuerza ni tiene una influencia en la fuerza, en la actividad", enfatizó.