El presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Alfonso Prat-Gay, aseguró hoy que su misión es "defender el valor del peso, y no el del dólar", rechazó que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) implique una restructuración inmediata de la banca pública, y desestimó cualquier tipo de inmunidad para los funcionarios públicos.

"Al Banco Central no le compete tener un valor de cambio de referencia. Nuestro objetivo es defender el valor del peso, y la paridad del dólar importa en función de si afecta o no a la inflación", dijo Prat-Gay en una conferencia de prensa, junto al vicepresidente del organismo, Pedro Lacoste.

Destacó que el precio del dólar se reacomoda más rápido, ya sea para arriba o para abajo, que el precio de los productos, según la incertidumbre o certeza que perciban los agentes del mercado sobre el futuro de la economía.

Por eso en mayo, cuando algunos analistas aseguraban un período de hiperinflación, el dólar orilló los $ 4, mientras que los precios de los productos se reajustaron en menor medida.

"Ahora, con disciplina fiscal, las expectativas son más favorables, lo que hace que el dólar baje, pero los precios tardan en reacomodarse", agregó. Además, Prat-Gay explicó que el compromiso firmado con el FMI "sólo establece la contratación de un asesor externo para que brinde un diagnóstico del estado de la banca pública".

Destacó la necesidad de que "la banca pública vuelva a sus objetivos originales. Que el Banco Nación sea lo que Carlos Pellegrini pensó originalmente. Pero porque en los años anteriores no haya funcionado bien no quiere decir que haya que eliminarlo".

También aseguró que la contracción o la ampliación de la base monetaria "estará en función de la pauta de inflación", que es del 22 por ciento, porque puede haber "una política monetaria expansiva sin provocar inflación" a partir de la necesidad de una remonetización de la economía.

Al mismo tiempo, salió al cruce de quienes critican al acuerdo con el FMI por "poco ambicioso", al asegurar que con las metas acordadas lo que se busca es "recomponer la credibilidad" de la Argentina con el organismo y con el mundo.

"Sólo firmamos por metas que podíamos cumplir, porque lo esencial (en este acuerdo) es recomponer la relación de confianza, de credibilidad, de Argentina tanto con el Fondo como con el mundo", dijo el funcionario durante una conferencia de prensa.

Lamentó que vio "una crítica despiadada a este acuerdo, porque los objetivos son poco ambiciosos, y eso se debe a la inusual relación de Argentina con el Fondo Monetario Internacional".

Cabe recordar que los medios explicaron ayer que el acuerdo con el FMI, más allá de la intención del gobierno por mostrarlo como un gran logro, "no es más que otro fuerte ajuste sobre Argentina, a través de presión impositiva y recorte de gastos".