Será en la próxima elección de gobernador, que se realizará el 14 de setiembre próximo. Se gestiona ante la OEA que Brasil preste las urnas utilizadas en sus comicios. Cada una de ellas cuesta 350 dólares.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires tiene previsto instrumentar en algunos distritos bonaerenses el novedoso sistema de voto electrónico para la elección de gobernador que se realizará el 14 de setiembre próximo, tal como se usó en Brasil en los últimos comicios presidenciales, para lo que gestiona ante la OEA que el vecino país preste las urnas utilizadas.
El proyecto del gobierno bonaerense apunta a instrumentar, a modo de prueba, el sistema del voto electrónico en algunos distritos bonaerenses con el mismo sistema que utilizó Brasil en las elecciones del año pasado, y por eso solicitó ante la OEA que interceda para que el país vecino les preste 420 mil urnas que fueron usadas en esos comicios.
El secretario de Modernización del Estado de la provincia de Buenos Aires, Florencio Randazo, explicó a Télam que el gobierno bonaerense le solicitó a la OEA "que triangule con Brasil" para que le presten las urnas, que tienen un valor de 350 dólares cada una.
En ese sentido, agregó que esto implica que la prueba del voto electrónico tendrá "costo cero" en cuanto a inversión para poder llevarla a cabo.
Aclaró que "falta definir el rango de implementación en la provincia", porque debe ser "gradual para no tener costos", por lo que aún "no está definida la cantidad de distritos en los que se instrumentaría".
"Cajero automático"
El funcionario, en diálogo con Télam, definió a la máquina con la que se emite el voto como "un cajero automático", que "tiene un sistema numérico universal del 1 al 0 y tres botones: uno rojo, uno verde, y uno blanco".
Debido a que el votante debe digitar el número de la boleta que representa al candidato que quiere votar, Randazo explicó que este sistema requiere "un cambio en las campañas políticas".
"Tienen que cambiar las campañas electorales y asociar al candidato con el número de la boleta que los postula", remarcó el funcionario.
El voto electrónico, que ya es utilizado en Brasil, Estados Unidos, Francia y España, entre otros países, elimina las urnas y boletas tradicionales y las reemplaza por pequeñas computadoras tipo "notebook", en las que los electores ingresan su voto.
La modalidad también garantiza "la simplificación del trabajo de las autoridades de mesa, sencillez para el elector, confidencialidad y seguridad del voto".
En reemplazo de las urnas y las boletas, el sistema prevé la utilización de pequeñas computadoras con pantalla de cristal líquido, que constan únicamente de un teclado numérico y tres teclas de mayor tamaño y diferentes colores, que cuentan además con el sistema braille, para que los no videntes puedan sufragar.
Cada candidato en la elección tiene un código numérico, que debe ser ingresado por el elector en la computadora, previa registración ante el presidente de la mesa con su DNI.
Tras el ingreso de la opción, una foto del candidato seleccionado aparece en la pantalla, con una información detallada del dirigente. Luego, el elector utiliza las teclas de colores para confirmar la elección (verde), corregirla (roja) o votar en blanco (blanca).
Según la experiencia utilizada en las elecciones de octubre del año pasado en Brasil, cada computadora almacena los votos realizados, pero no la identidad del votante, en un disco flexible con un sistema de doble encriptación.
Al terminar el comicio, los discos son retirados y transportados a los centros de cómputos, donde se los coloca en una PC y se calculan los resultados, los que son transmitidos al Tribunal Federal Electoral.
Ya en 1996, Brasil experimentó por primera vez el sistema, pero recién en los últimos comicios en los que Luiz Inacio Lula Da Silva resultó electo presidente se votó en todo el país con la nueva modalidad.
Cambio cultural
"Es una forma que por el costo, por la transparencia que garantiza y por la agilidad puede suplantar el sufragio universal y que puede utilizarse para otras formas de participación ciudadana, como por ejemplo para el presupuesto participativo", agregó Randazo.
Reiteró que este sistema "requiere un cambio cultural relacionado al número de boleta en la campaña, porque ponés el número de boleta y aparece la cara del candidato".
"Con este sistema se evita el fraude tradicional que puede surgir en la misma mesa entre autoridades y fiscales, porque cuando se cierra la máquina emite un ticket con los resultados de esa urna, el presidente de mesa retira el disquete y lo envía a la junta electoral", precisó.
El pedido a Brasil, según explicó Randazo, fue de 420 mil urnas electrónicas, porque ese país tiene un convenio con la OEA que "permite que países que quieran experimentar esta forma de votar accedan a esas urnas", concluyó. (Télam)
