Tres delincuentes que sacaron de su recorrido a un coche de la Línea 4 con intención de robar la máquina monedera, pusieron en serio peligro la vida del chofer y cinco pasajeros cuando se tirotearon con los patrulleros que los perseguían por calles y avenidas ubicadas al norte de la planta urbana.

En los primeros minutos de hoy, tres jóvenes ascendieron al colectivo en Pedro Vittori y Mariano Comas, pagaron, tomaron asiento y luego esperaron llegar a Castelli y Necochea para recién revelar sus verdaderas intenciones. Entonces encañonaron al chofer y se presentaron ante sus compañeros de viaje como terroristas dispuestos a volar con una granada en caso de hallar resistencia.

Con la situación bajo control, los asaltantes obligaron al conductor a continuar la marcha, pero en Facundo Zuviría y Espora la acción que se desarrollaba sobre el colectivo fue observada y denunciada -en forma telefónica- por una automovilista.

La respuesta policial no se hizo esperar y en contados minutos las patrullas del Comando Radioeléctrico y unidades móviles de distintas dependencias de la URI salieron tras el colectivo secuestrado, al que por fin avistaron cuando circulaba por calle Rivadavia a la altura de Risso.

Dos móviles policiales -de Comando e Infantería-, darían alcance al interno 9 de la Línea 4 cuando sobrepasaba calle Larrea, allí lo interceptaron y obligaron a detener la marcha, pero cuando los uniformados se acercaban a la unidad, uno de los malvivientes abrió fuego contra ellos desde la puerta trasera.

En medio de la confusión que sucedió al sorpresivo recibimiento, el colectivo reanudó la marcha por Rivadavia, pero ahora seguido de cerca por un gran número de patrulleros.

Por fin, al llegar a calle French el ómnibus de pasajeros se internó en una oscura calle de tierra que se interna en un basural y finalmente terminaría empantanado en un sembradío.

Nuevamente los policías siguieron al colectivo y una vez más fueron rechazados a balazos, no obstante uno de los delincuentes pudo ser apresado cuando intentaba internarse en un cañaveral, tal como ya lo habían hecho sus dos compañeros.

Acto seguido, los uniformados se ocuparon de llevar tranquilidad a los pasajeros, una mujer de unos 50 años de edad y cuatro jóvenes, quienes se veían aterrados, al igual que el chofer.

Mientras esto ocurría, la acción policial se desdobló y otros agentes fueron tras los fugitivos, con lo que siguió una cacería que incluyó una lucha cuerpo a cuerpo, con resultado de un policía lesionado en French y vías ferroviarias. Más tarde los fugitivos habrían de ser nuevamente avistados en un barrio Fonavi de los alrededores y allí, tras escalar muros y correr sobre los techos de la viviendas, habría de ser capturado un segundo integrante de la banda.

Fuentes de la URI dijeron esta mañana que, llevados a Jefatura, los detenidos fueron identificados y puestos a disposición de la Justicia competente. Los mismos voceros de prensa dijeron que los asaltantes apresados se apellidan Contreras y Figueroa, quienes cuentan 21 y 27 años de edad y no tendrían antecedentes. Mientras, el tercer hombre logró darse a la fuga y aún esta mañana era buscado por la policía.