Internacionales: INTE-02 Mataron a un secuestrador que dijo ser de Al Qaeda
Un joven de 26 años se atrincheró junto a sus rehenes durante nueve horas. Estaba armado con una pistola 9 mm y un cuchillo.


Washington. - Un hombre armado que se presentó como miembro de la red Al Qaeda y que tomó a 17 rehenes en una Universidad de Tennessee (sur), fue muerto a manos de la policía, informó hoy la policía.

El individuo, identificado como Harold Kilpatrick, de 26 años, mantuvo a 16 estudiantes y a su profesor como rehenes durante más de nueve horas.

La policía ingresó anoche en el edificio tras escuchar disparos.

"Se iniciaron negociaciones las que se rompieron y comenzó a disparar. Mi gente entró y lo derribó. La situación terminó", dijo el jefe de policía de Dyseburg, Bobby Williamson, inmediatamente después del tiroteo.

Dos rehenes resultaron heridos, pero no estaba claro si fueron heridos por la policía o Kilpatrick, dijo Williamson.

Los dos heridos fueron traslados al hospital de Memphis para recibir atención médica, pero sus vidas no corren peligro, añadió.

El atacante entró a la universidad a comienzos de la tarde, y liberó a tres mujeres, una de ellas embarazada, hacia el anochecer. La policía mantuvo un fuerte cerco sobre el campus de la Universidad de Dyersburg (a 100 km de Memphis).

Aparte de agua y vasos, Kilpatrick no hizo ninguna otra demanda y permaneció atrincherado con los rehenes en un salón de clase del segundo piso de la universidad, hablando con la policía a través de los estudiantes, que hablaban con los negociadores por sus teléfonos celulares.

"No hubo comunicación directa", dijo la portavoz de la policía de Dyersburg, Lisa McDowell.

Agentes del FBI fueron llamados al campus universitario debido a una nota suicida en la que Kilpatrick decía ser miembro de la red Al Qaeda y planeaba disparar contra varias personas antes de quitarse la vida, abundó McDowell.

La policía cree que Kilpatrick, ex estudiante de Dyersburg, visitaba a su hermana, quien dio a la policía la nota suicida que su hermano dejó en su casa.

Durante la toma de rehenes, Kilpatrick se negó a hablar con su hermana.

(AFP)