"Deberíamos cerrarlo ya", consideró el secretario de Derechos Humanos, Domingo Pochettino, al comentar la decisión del gobernador Jorge Obeid de evacuar en un plazo de 90 días el pabellón 5 Sur de la Cárcel de Coronda.
Pochettino recorrió las instalaciones ayer, junto al director de Derechos Civiles y Políticos de la secretaría, José Luis Benaglia, y el director provincial del Servicio Penitenciario, Fernando Rosúa, después de que el fin de semana un grupo de internos del pabellón 5 realizó una protesta en reclamos de mejores condiciones.
"Indudablemente, es una cárcel muy vieja. Y se nota el daño de los diferentes motines, más allá del trabajo de reconstrucción y la construcción de pabellones nuevos. Pero eso es algo que lleva tiempo y se dificulta por la gran cantidad de gente", explicó el funcionario.
Comentó también que los internos de ese pabellón están confinados allí por problemas de convivencia, pero que el sitio "no está en condiciones de alojarlos. Hay problemas de desagües, de agua, el ambiente no es el que se necesita para tener una vida decorosa y digna", admitió.
"Deberíamos cerrarlo ya", convino Pochettino, pero lo único factible es -tal como dispuso el gobernador- no llevar más gente ahí y proceder a su progresiva evacuación.
"Lo ideal es que ese pabellón quede solamente para oxigenar cuando se están haciendo refacciones en otros. Pero estamos contrarreloj, tomando las decisiones que son posibles, después de muchos años de atraso y mientras se lleva adelante el plan de construcciones que se puso en marcha ya en el anterior gobierno", agregó.
Pero, según Pochettino, la superpoblación no alienta la posibilidad de soluciones inmediatas. "La población carcelaria crece mes a mes. Y del 96 % de la gente que está presa, la mitad no tiene trabajo y la otra tiene uno precario. Estamos tratando, en estas condiciones sociales, de hacer lo mejor que podemos", completó.
