La llevarán adelante cinco agrupaciones "duras"en todo el país. Cristina Fernández de Kirchner ratificó que no será reprimida la protesta social.
Cinco agrupaciones piqueteras duras convocaron a jornadas de movilización los próximos días 19 y 25, con bloqueos de tránsito y concentración frente al Congreso, en rechazo al proyecto gubernamental de reforma laboral y por la ruptura con el FMI.
"Queremos la inmediata derogación de la reforma laboral, la no sanción del nuevo proyecto y la restitución de los 250.000 planes (subsidios para desocupados) que el gobierno dio de baja", dijo Gustavo Giménez, del Movimiento de Trabajadores Desocupados Teresa Vive, una de la entidades convocantes.
El dirigente -que acompañó al titular del MIJD, Raúl Castells, en la huelga de hambre de 6 días en el Ministerio de Trabajo- reclamó también la "ruptura del gobierno con el Fondo Monetario Internacional" y dijo "no al pago de la deuda externa".
Giménez informó que la primera jornada, el jueves próximo, incluirá cortes de tránsito de 10 a 17 en calles y rutas tanto del área metropolitana como del interior. Después, a las 18, habrá una concentración ante el Congreso Nacional, donde está previsto que el tema sea tratado en sesiones extraordinarias a partir de una iniciativa presentada por el Ejecutivo con consenso sindical, pero que este sector rechaza. Para la segunda jornada, el miércoles 25, no se adelantó qué modalidad adquirirá la protesta.
El plan de lucha fue suscripto también por el Bloque Piquetero, el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), la Coordinadora Aníbal Verón y el Frente de Trabajadores Combativos (Mesa Nacional).
La misma línea
En tanto, la senadora Cristina Fernández de Kirchner ratificó que el gobierno nacional "no va a criminalizar la protesta" de los piqueteros y resaltó que "la solución no es policial".
La legisladora reiteró la política oficial en Nueva York, en conferencia de prensa, antes de regresar a Buenos Aires.
"El gobierno no criminalizará la protesta, aun a sabiendas de que hay una utilización política de un reclamo político", aseveró Fernández de Kirchner.
"Hecho foquista"
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, advirtió que los incidentes protagonizados anoche en la avenida 9 de Julio por manifestantes de organizaciones barriales son "un hecho casi armado. Este fue un hecho asombroso. Un hecho casi foquista. Aparecieron y armaron todo este `balurdo' y se fueron", subrayó Fernández, al ser consultado por DyN sobre los enfrentamientos entre manifestantes y automovilistas.
El jefe de Gabinete reconoció que "es un hecho muy raro, que habría que investigarlo" y arriesgó que "pareciera un hecho casi armado".
Fernández advirtió que "hay sectores que están buscando que el Estado reprima con el objeto de victimizarse", pero alertó que estos grupos "están logrando un gran descrédito, y enojo de la sociedad".
Por su parte, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, confirmó que la jueza interviniente, Angela Braidot, ordenó la detención de dos personas por los incidentes que provocaron al menos cinco heridos.
