A comienzos de diciembre del año pasado, El Litoral recorrió las defensas de la costa este de la ciudad y San José del Rincón.

En esa oportunidad, se detectó que por robos y distintos hechos de vandalismo en las estaciones y pozos de bombeos, que los dejaron prácticamente fuera de servicio, los pobladores quedaban en riesgo ante una eventual crecida.

"Falta casi todo en los equipos eléctricos de las casabombas necesarias para desagotar zonas bajas ubicadas junto a las defensas, que resultan imprescindibles cuando en medio de una crecida se producen precipitaciones importantes", expresaba textualmente el artículo publicado.

Lo llamativo era que, según sostenían las entidades intermedias de la costa, la situación no había cambiado mucho respecto del informe realizado en 2002 por la Dirección Provincial de Obras Hidráulicas, que constataba destrozos en los terraplenes de La Guardia, Alto Verde, Colastiné y Rincón.

A fines del año 2003 llegó la noticia esperada: se informó que se licitaría la reparación de elementos electromecánicos y electrobombas de las estaciones de bombeo del sector este y noroeste de nuestra ciudad y la costa.

Un parte de prensa oficial daba cuenta de que la obra tenía un presupuesto oficial de 1,6 millones de pesos. El objetivo era reparar 14 estaciones y pozos de bombeo en los siguientes terraplenes de La Guardia, La Guardia Centro, Virgen de Guadalupe, Colastiné Norte, Garello, La Lonja, Añatí, Los Naranjales, La Guardia Norte, El Pozo, Alto Verde, French Norte y French Sur.

"Hay estaciones de bombeo con malezas dentro de los recintos de material para los tableros, candados destrozados y las tapas de metal, forzadas", volvía a decir El Litoral en esa época.

Días después se informaba que se habían presentado tres propuestas en la licitación en un acto realizado en el Ministerio de Obras Públicas. Las ofertas habían superado en sus cotizaciones el presupuesto oficial. Sólo restaba que la comisión evaluadora de ofertas determinase a qué firma se debían adjudicar los trabajos.

El informe de la comisión evaluadora se elevó en febrero de este año. Sin embargo, el expediente siguió transitando un largo camino burocrático y ahora descansa desde marzo en algún lugar de la Unidad Ejecutora de Recuperación de la Emergencia Hídrica y Pluvial, es decir, en el Ente de la Reconstrucción.

"La obra todavía no comenzó a ejecutarse", aseguraron hoy fuentes del Ministerio de Asuntos Hídricos.

¿Por qué la obra se derivó al Ente si se licitó a través de Obras Públicas? Algunas versiones, basadas en la revisión del seguimiento de expedientes, dicen que se debe a que en términos generales, todas las obras financiadas por fondos hídricos y del comité de emergencia, "las siguió manejando el Ente", sostuvieron las fuentes.

La cuestión es que seis meses después, todavía no se iniciaron los trabajos para reacondicionar estos equipos vitales en épocas cuando el río crece y no pueden evacuarse las aguas hacia afuera del recinto por gravedad, ya que se deben cerrar las compuertas previstas para tal fin.

Con respecto a las cuatro estaciones de bombeo del sector oeste, el secretario de Asuntos Hídricos de la Municipalidad, Horacio Ruiz, confirmó que desde hace dos semanas están funcionando a pleno las casabombas 2, 3 y 4. En tanto la 1 lo hace en un 60 por ciento de su capacidad de bombeo porque aún faltan instalar algunas bombas. Agregó además que el 20 de julio la EPE finalizó sus trabajos.

Con la situación actual, "tenemos un 30 por ciento más de capacidad de bombeo de lo que teníamos el 29 de abril de 2003", dijo Ruiz. Cuando se finalicen los trabajos en la casabomba N° 1 esta cifra se elevará al 50 %.