Peritajes relacionados con la muerte de Pacheco
Quieren comprobar que, efectivamente, es consumidor de droga.Pacheco, un funcionario del Estado, apareció asesinado el viernes 8 de este mes.

En el marco de las investigaciones que se llevan adelante por la muerte Héctor Edgardo Pacheco, el delegado del Tribunal de Cuentas en la Caja de Jubilaciones de la Provincia, el juez de Instrucción Rubén Saurín ordenó una serie de peritajes para comprobar si el detenido -quien confesó ser el autor del homicidio- dice la verdad cuando asegura ser consumidor de drogas.

Por ese motivo, se le extrajeron muestras de sangre y de cabello para ser analizados por los peritos. Además, se cumplió con los peritajes médicos y psiquiátricos de rigor en estos casos.

Como se recordará, el viernes 8 de este mes fue encontrado el cuerpo sin vida de Pacheco en su casa de Crespo 3725, frente al parque Garay. Poco después, el joven detenido dijo ante la Justicia haber matado al funcionario mientras intentaba robarle dinero que, suponía, se encontraba guardado en algún lugar de la vivienda.

Este asesinato tuvo fuerte repercusión pública, sobre todo por las funciones que prestaba la víctima al servicio del Estado provincial. Según trascendió de fuentes ligadas con la causa, la víctima se habría comunicado telefónicamente con una agencia para la cual trabajaba como streeper el detenido, quien, al tomar conocimiento de la llamada, se dirigió a la casa de Pacheco.

Según el testimonio del detenido, en el pasado había observado que la víctima portaba importantes sumas de dinero en su bolsillo, por lo que supuso que en la casa habría un monto considerable para ser robado.

De acuerdo con lo que trascendió de la declaración de ayer, el detenido habría dicho que encontró un revólver calibre 38 que Pacheco guardaba detrás de un armario. Lo tomó y, mientras la víctima se encontraba acostada y de espaldas, lo apuntó en la nuca sosteniéndole fuertemente la cabeza y comenzó a pedirle la plata.

En ese momento -y siempre de acuerdo con la versión del detenido- se le habría escapado un disparo. Fue entonces cuando decidió "rematarlo" con dos tiros más que impactaron a pocos centímetros del primer tiro.