Sigue el escándalo en Brasil
Nuevas denuncias de corrupción
El escándalo por las denuncias de corrupción en el gobierno del presidente Lula da Silva tuvo hoy un nuevo capítulo cuando una diputada opositora denunció también sobornos para aliarse con el PT.

La denuncia de una diputada opositora de que recibió una millonaria oferta de dinero para sumarse a la base parlamentaria aliada al gobierno, echó hoy más leña al fuego de los escándalos de corrupción que sacuden a Brasil.

Esta nueva denuncia, que se une a otras similares, fue formulada por la diputada Raquel Teixeira en el aeropuerto de Sao Paulo, poco antes de viajar a París, donde permanecerá hasta el viernes próximo, cuando aseguró que regresará a Brasil y dirá todo lo que sabe.

Según el canal Globonews, la legisladora del opositor Partido de la Social Democracia fijo que un parlamentario de la base aliada al gobierno le ofreció hace dos años 30.000 reales (unos 12.000 dólares) al mes y un "bono anual" de 1.000.000 de reales (unos 410.000 dólares) por sumarse a la bancada oficialista.

Teixeira afirmó que rechazó la oferta, no identificó a quien intentó "comprarla" ni explicó porqué nunca hizo público el caso.

Desmentida

El presidente del gubernamental Partido de los Trabajadores (PT), José Genoino, se vio obligado a volver a desmentir que esa formación haya montado una red de sobornos en el Parlamento, como denunció el pasado lunes el presidente del Partido Laborista, Roberto Jefferson.

"Son todas mentiras", dijo Genoino, que esta semana también desmintió tajantemente las acusaciones de Jefferson, quien sostiene que el tesorero del PT, Delubio Soares, pagó 12.000 dólares al mes a muchos legisladores para garantizar así su fidelidad al gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva en el Congreso.

En medio de la crisis política desatada por sucesivas denuncias, el gobierno también debió hoy desmentir que el jefe de Estado haya decidido destituir al presidente del Banco Central, Henrique Meirelles, quien es investigado por un presunto fraude fiscal.

"Son infundadas las noticias divulgadas por la prensa sobre una eventual sustitución en la presidencia del Banco Central", afirmó el Ejecutivo en un nota dirigida a tranquilizar los mercados, que esta semana fueron sacudidos por la crisis política.

Diferencias

En el Congreso, los jefes de las bancadas oficialista y opositora intentaron hoy sin ningún éxito superar sus diferencias respecto a la elección del presidente y el relator de una comisión especial que investigará otras denuncias que salpican directamente a Jefferson.

El caso se refiere a corruptelas detectadas en Correos y en el Instituto de Reaseguros, dos entes estatales en las que se dice que funcionaba una red que amañaba licitaciones públicas y era dirigida, entre otros, por Jefferson, quien hasta hace una semana era un fiel aliado de Lula.

La comisión parlamentaria deberá reunirse el próximo martes para escuchar por primera vez a Jefferson, quien ha dicho a través de sus asesores que tiene "una cajita de maldades" con las pruebas de sus denuncias.

Pero antes de eso, los miembros del grupo parlamentario deberán ponerse de acuerdo sobre el presidente y el relator de la comisión y también sobre el alcance de la investigación, que según el PT debe ampliarse hasta la gestión del antecesor de Lula, Fernando Henrique Cardoso.

Otra comisión

También en el Congreso se discutía todavía la formación de otra comisión especial, pero para investigar las graves denuncias de Jefferson contra el PT, ahora reforzadas por la diputada Teixeira.

En fuentes gubernamentales se decía hoy que el PT confía en que el compás de espera que abre el fin de semana puede servir para apaciguar los ánimos en el Congreso, que durante los cinco últimos días ha estado prácticamente centrado en las corruptelas y dejado de lado sus tareas legislativas.

Sin embargo, también existían fuertes rumores en el sentido de que revistas que saldrán a la calle entre hoy y mañana pueden contener nuevas denuncias contra el PT, que en sus 25 años de existencia hizo de la lucha contra la corrupción una bandera.

Seguridad a los mercados

El ministro de Hacienda de Brasil, Antonio Palocci, dijo hoy que se investigarán los escándalos de corrupción surgidos en su país y aseguró a los mercados financieros que la crisis no afecta a la economía del país.

"Si dejamos que los problemas políticos afecten a nuestros compromisos (con los mercados internacionales), tendremos que pagar un precio muy alto", afirmó Palocci.

En declaraciones a la prensa en Londres antes de reunirse hoy con sus colegas del Grupo de los Ocho (G-8, siete países más industrializados y Rusia) y de tres países emergentes como India, China y Suráfrica, el ministro indicó que "la presente tensión política se disipará" porque "se abrirán investigaciones".

EFE