Gripe aviar: ONU prepara un plan de contingencia

La ONU prepara un plan de contingencia para coordinar la respuesta internacional al virus de la gripe aviar, que podría mutar y provocar una epidemia de dimensiones imprevisibles entre los humanos.

El Consejo Económico y Social de la ONU (Ecosoc) se reunió hoy para debatir estrategias internacionales y qué políticas de prevención deben adoptar los gobiernos para afrontar el desafío.

El coordinador de la ONU para la gripe aviar y humana, David Nabarro, sugirió en la reunión que los planes pasan por mejorar la infraestructura sanitaria de las granjas de producción de aves y luego producir y almacenar medicamentos, como los antivirales.

Tras anotar la necesidad de una coordinación internacional, indicó que EE.UU. es el país de donde proviene el mayor apoyo para la oficina que dirige, y celebró en ese sentido la decisión del presidente George W. Bush de pedir una partida extraordinaria para la adquisición de vacunas.

Según Nabarro, el riesgo de una epidemia de gripe humana es mayor ahora que nunca desde 1968, cuando se produjo la última de las tres grandes pandemias que afectaron a la población en el siglo XX.

El riesgo está vinculado directamente con los brotes de gripe aviar, causada por los agentes patógenos del virus H5N1 en las aves de corral, y que está afectando severamente a los países asiáticos desde mediados de 2003.

Desde finales de julio, el virus se ha propagado hacia el este, en Oriente Medio y Europa, lo que incrementa la posibilidad de que contagie a las personas y que provoque una epidemia entre la población humana.

"El problema está en las aves y la solución de momento también. Si lo atacamos, habrá menos oportunidades de que se infecten los humanos", declaró David Heymann, representante de la dirección general de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Hasta el momento, ya se han infectado 122 personas, de las cuales 62 han muerto, según cifras de la OMS, aunque los científicos y expertos aseguran que el virus H5N1 podría propagarse hasta provocar millones de muertes en unos meses.

La directora general adjunta de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Louise Fresco, resaltó las graves consecuencias económicas que podría ocasionar una epidemia, por lo que indicó que los 450 millones de dólares que se calcula que costarán las medidas de prevención no es demasiado.

"El costo será mayor en los países pobres, debido a que es donde las infraestructuras de producción de aves son más básicas, por lo que también se debe tener en cuenta la dimensión de la pobreza en las proyecciones para prevenir la epidemia", declaró.

EFE