Los profesionales de la salud mental marcharon hasta el Ministerio de Salud y entregaron un petitorio a sus autoridades, en donde plantean la necesidad de ser incluidos en el presupuesto 2006.
Muchos de estos profesionales están atendiendo las necesidades de las familias que padecieron las consecuencias de la inundación del Salado, en abril de 2003, y desde entonces están brindando atención primaria, mientras que otros equipos trabajan en las cárceles de Santa Fe y Rosario. Sus proyectos están siendo financiados por el Ente de la Reconstrucción y por el Ministerio de Gobierno, respectivamente, razón por la cual insistieron en ser incluidos en el presupuesto de Salud.
Luego de la entrega del petitorio, desde la Subsecretaría de Logística de la cartera sanitaria se les informó que el gobierno provincial había decidido dar continuidad a los contratos (como monotributistas) de los 23 psicólogos que dependen del Ente de la Reconstrucción. De esta manera, desde el 1° de enero de 2006 pasarían a estar contratados por la Dirección de Salud Mental de la provincia.
Sin embargo, se pudo saber que se estaría analizando entre las autoridades sanitarias, el Colegio de Psicólogos y el gremio de ATE, la necesidad de incrementar los montos de las remuneraciones de esos profesionales. También se aclaró que se aceptarían estos nuevos contratos hasta que se pueda resolver la creación de los cargos para los psicólogos.
La psicóloga Mónica Niel, secretaria gremial del Colegio de Psicólogos, manifestó la satisfacción de la institución en relación con los avances en las negociaciones, pero aclaró que "queremos que sean considerados en el presupuesto de salud mental 2006 a todos los planes que están trabajando, como los equipos de la cárcel y los que trabajan con la infancia, además de los que están en los barrios de la ciudad desde la inundación y ahora hacen atención primaria".
Por eso insistió en que en el petitorio se solicitó "que se dejen de hacer contratos basura, ya que los psicólogos no atienden necesidades coyunturales de la comunidad, y que se termine con el trabajo ad honorem en los hospitales".