Con bombas molotov dañaron tres viviendas
Atentados incendiarios contra gremialistas de Luz y Fuerza
Hasta el balcón llegó una de las bombas arrojadas esta madrugada. Foto: Amancio Alem.. 

Atacaron con bombas los domicilios de tres miembros de la Comisión Directiva del gremio. Dos de los atentados se registraron en nuestra ciudad y el tercero en Santo Tomé.

Tres atentados incendiarios perpetrados en las últimas horas, dos en el barrio de Guadalupe y el restante en la vecina ciudad de Santo Tomé, estuvieron dirigidos contra otras tantas personas que tienen en común su condición de dirigentes del gremio de Luz y Fuerza.

El primero de los ataques -con bomba molotov-, tuvo lugar poco antes de las dos de la mañana en la vivienda de calle Belgrano al 2600 donde se domicilia Mario Rojas. La deflagración dejó una mancha en la pared y motivó la intervención de los agentes de la Comisaría 12a.

Minutos más tarde una segunda acción terrorista tuvo lugar en jurisdicción de la Seccional 8a., más precisamente en calle Antonia Godoy al 7900, donde reside Rubén Gómez. En este caso el fuego dañó la ventana donde hizo blanco el artefacto.

Como consecuencia de un tercer acto intimidatorio provocado antes de las cinco, también en jurisdicción de la Seccional 8a., estallaron los vidrios de las ventanas y el portón del garaje de una vivienda de calle Angel Casanello al 400.

El dueño de casa, Armando Botta, habría dicho a los policías encargados de investigar este y otros episodios criminales de idéntica factura que fueron dos las potentes explosiones que dañaron su casa.

Los sucesos referidos tienen por antecedente inmediato los daños provocados a los vehículos de otras cuatro personas vinculadas con Luz y Fuerza el 10 del corriente.

Entonces, los propietarios de cuatro automóviles recibieron una ingrata sorpresa. Cuando salían de una reunión descubrieron que las carrocerías de los vehículos habían sido rociadas con una sustancia altamente corrosiva.

Los damnificados denunciaron los daños perpetrados junto a las instalaciones de la vecinal Altos del Sauce, en la Comisaría 19ma. y en esa misma dependencia agregaron que, bajo de las ruedas de los vehículos también hallaron clavos "miguelito".

Alberto Liendo, María del Carmen Sánchez, Raúl Crespi y Carlos Piñesqui salían de una reunión del personal de Luz y Fuerza cuando el 9 del corriente advirtieron los deterioros provocados en una Chevrolet Blazer, un Renault Twingo, un Peugeot 405 y un Peugeot 206.

Una asamblea, el viernes

Los ataques a miembros del Sindicato de Luz y Fuerza de Santa Fe provocaron esta mañana todo tipo de comentarios entre los trabajadores del sector, que presentan un denominador común. Se habla con insistencia de un creciente alejamiento -o enfrentamiento- entre el gremio local y la federación nacional que los agrupa, la Fatlyf.

Las diferencias partirían de la existencia de una visión diferente sobre las privatizaciones hechas en Buenos Aires en los '90 (Santa Fe fue una excepción), así como del creciente acercamiento entre las conducciones local y la del gremio de Córdoba, que también se ha alejado -incluso antes- de la Federación lucifuercista.

Más allá de las versiones e interpretaciones sobre lo que ha ocurrido con los dirigentes sindicales que fueron blanco de anónimos ataques -que coinciden en sus horarios y métodos-, existe un dato cierto, verificable: el viernes próximo se celebrará una asamblea en la sede de calle junín.

Sin resultados, durante buena parte de la mañana, El Litoral intentó comunicarse con algún representante de la comisión directiva, con el fin de conocer su posición sobre lo ocurrido con parte de sus integrantes.

Redacción de El Litoral