Primera etapa del proceso
El presidente Kirchner pone en marcha la normalización del PJ
El debate parlamentario del proyecto oficial de reforma del Consejo de la Magistratura -una prioridad política del gobierno- será un punto de inflexión en el proceso de reordenamiento del partido, que el presidente planea poner en marcha durante el transcurso de este año.

CMI/Redacción El Litoral

El presidente de la Nación, Néstor Kirchner, confía en la que la discusión de la controvertida iniciativa de reformar el Consejo de la Magistratura, que entre otros puntos, propone reducir de veinte a trece el número de miembros del organismo judicial, termine por fortalecer la base política del kirchnerismo.

La expectativa está puesta especialmente en la Cámara de Diputados donde el Ejecutivo aspira a sumar los votos de fuerzas provinciales, legisladores transversales -como los cinco que responden al intendente de Córdoba, Luis Juez- y duhaldistas que buscan recomponer con el poder central.

A pesar de que esas alianzas puedan resultar coyunturales, en el gobierno afirman que el posicionamiento de algunos sectores a favor del proyecto -ampliamente resistido por la oposición y organizaciones no gubernamentales- develará la verdadera posición de fuerza del kirchnerismo en el Parlamento.

Además, el resultado de la votación prevista para el período de extraordinarias que se reanudará en febrero constituirá un dato clave para la reorganización del PJ que, en el curso de este año, Kirchner planea convertir en un organismo "moderno, ágil y federal".

El duhaldismo dividido

La incógnita central está puesta en la posición que asumirá el sub-bloque Peronista Federal que aglutina a los ex duhaldistas, hoy divididos entre quienes aspiran a sostener el diálogo con el gobierno y aquéllos que, con la mirada puesta en 2007, prefieren asumir una actitud crítica ante el poder central.

En el primer grupo militan la senadora Hilda "Chiche" González de Duhalde y los diputados Eduardo Camaño, Francisco de Narváez, Jorge Sarghini y Juan José Alvarez. El segundo está claramente liderado por el titular del PJ bonaerense, José María Díaz Bancalari.

Después de competir en los comicios legislativos de octubre por el duhaldismo, Díaz Bancalari retomó el contacto personal con Kirchner y apoyó el plan de reorganización del PJ del que Kirchner ya dio indicios formales.

"La normalización del partido es un objetivo compartido con el presidente desde hace mucho tiempo. Es necesario abandonar el estado de acefalía. En mi opinión, al PJ lo debe presidir Kirchner", le dijo a este diario el legislador bonaerense.

Kirchner dio los primeros pasos para encarar ese proceso hace quince días cuando conversó con el gobernador de Jujuy, Eduardo Fellner, sobre el plan para "modernizar" al PJ -intervenido por la Justicia Electoral desde 2004- que tiene previsto comenzar con la depuración de padrones.

Esa medida podría ser la puerta de entrada al PJ de dirigentes cercanos al kirchnerismo que formaron parte de las filas del peronismo o pertenecen a fuerzas políticas afines al proyecto político del presidente y a su posible reelección en 2007.

Cambio de perfil

El plan contempla la reducción de miembros de los dos principales órganos partidarios, el Consejo y el Congreso Nacional del PJ. Ambas reformas, especulan en la Casa Rosada, requerirán de un acuerdo de la representación del justicialismo en todos los distritos del país.

La idea de otorgarle al partido un perfil "federal" apunta, básicamente, a terminar con la representación proporcional que históricamente benefició a la provincia de Buenos Aires, primer distrito electoral del país, en la conformación de la jefatura partidaria.

Los tres ejes de la renovación comenzaron a ser analizados por Fellner y los gobernadores Mario Das Neves (Chubut) y Gildo Insfrán (Formosa) a quienes Kirchner imagina como miembros de una comisión normalizadora al estilo de la vieja Comisión de Acción Política (CAP).

Esos gobernadores, según confiaron a este diario fuentes cercanas a dos mandatarios, todavía no tuvieron indicios firmes acerca de si Kirchner finalmente aceptará conducir el PJ, obedeciendo a la máxima de que "el presidente de la Nación, es el presidente del partido".

Esa decisión está lejos de ser trascendente para Kirchner en lo inmediato, por lo que nadie descarta que acepte asumir la conducción del partido en forma simbólica para luego ungir a un gobernador aliado en el primer cargo partidario.

Como razón de peso para esa salida, en el gobierno afirman que Kirchner hará todo para evitar que la normalización del PJ apresure la discusión de candidaturas para 2007. "El presidente quiere que el 2006 esté dominado por los temas de gestión", razonó una fuente con acceso directo a Kirchner.

En territorio bonaerense

Néstor Kirchner buscará a partir de fin de mes, consolidar su liderazgo político con una nutrida agenda de actos en el conurbano bonaerense y el interior del país. Con diversos actos institucionales en el conurbano, donde buscará sumar el apoyo de intendentes que respondían al duhaldismo antes de las elecciones de octubre, pero que estarían dispuestos a pasarse de bando tras el retiro de su antiguo jefe político. Tal es el caso del intendente de Berazategui, Juan José Mussi, quien confirmó que compartirá su primer acto con Kirchner en ese distrito el próximo 25 de enero, bajo el paraguas de anuncios de obras públicas. Unas semanas más tarde, Kirchner visitaría el partido de Chacabuco.

Rossi y la visita a Brasil

El presidente del bloque oficialista en la Cámara de Diputados, Agustín Rossi, se mostró satisfecho de lo conseguido en Brasil por el presidente Néstor Kirchner, con quien volverá a viajar mañana a Bolivia, a la asunción presidencial de Evo Morales.

"Hubo un par de definiciones estratégicas del presidente: primero la ratificación del Mercosur como ámbito principal para el desarrollo del país y donde la relación con Brasil es prioritaria. La otra es el reconocimiento de los problemas que tienen Paraguay y Uruguay por las asimetrías comerciales, en particular con las relacionadas a la localización de las inversiones, y la decisión de solucionarlas a la brevedad", enumeró Rossi.

El legislador puso de relieve la decisión de ambos primeros mandatarios de abrir las puertas a otros países del continente que se quieran sumar al bloque, como son los casos de Venezuela y Bolivia, para "ampliar la base del Mercosur y fortalecer el bloque regional".

Respecto del tema comercial, donde aún están por resolverse la aplicación de la Cláusula de Adaptación Competitiva y el comercio automotor, Rossi destacó la "muy buena recepción" de parte de las autoridades brasileñas para resolverlo.

Remarcó, en este sentido, el compromiso de Brasil de firmar la puesta en marcha de la Cláusula de Adaptación Competitiva antes del 31 de enero, como se había acordado en Iguazú el pasado 30 de noviembre, razón por la cual el secretario de Industria, Miguel Peirano, se quedó en la capital brasileña para pulir los detalles del acuerdo.

Explicó que las trabas en este tema es cuando se considera que la importación de un producto provoca daño en la industria de otro país y la automaticidad de la cláusula: mientras Brasil quiere que no sea automática, Argentina sí.

También calificó como de "estratégica" la creación de una empresa binacional para la producción de reactivos para el sida, teniendo en cuenta que "Brasil y la Argentina son de los países que más reactivos compran porque son de los pocos que cubren gratuitamente para los enfermos todo el tratamiento, razón por la cual se trata además de un tema económico".

Finalmente, destacó el convenio de reciprocidad para la exploración y explotación petrolera entre Enarsa y Petróleos de Venezuela, por la cual Argentina accederá a la Cuenca del Orinoco, una de las más ricas del mundo, y Venezuela a la del Golfo de San Jorge.

Rumbo a Bolivia

El presidente Néstor Kirchner viajará mañana a La Paz, y regresará el mismo día -cerca de las 20.30-, sin que esté prevista ninguna reunión a nivel bilateral con Evo Morales. Harán lo propio los mandatarios Luiz Inácio Lula Da Silva, de Brasil; Ricardo Lago, de Chile, y Alejandro Toledo de Perú.

Como se ha dicho, los presidentes Kirchner, Lula y Chávez le han propuesto a Morales "un plan de ayuda para el desarrollo" de Bolivia. Así, Venezuela le ofrecerá asfalto para la construcción de carreteras, Argentina hará lo propio con medicinas y vacunas, y Brasil créditos del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), por un monto aún no precisado.

Acompañarán al jefe de Estado argentino el canciller, Jorge Taiana; el ministro del Interior, Aníbal Fernández; el titular del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi; el director de Políticas Comunitarias del Ministerio de Desarrollo Social y los dirigentes del Movimiento Barrios de Pie, Jorge Ceballos, y el piquetero y próximo funcionario del gobierno nacional, Luis D'Elía, entre otros.