Porque nunca fue tan sencillo decorar y ambientar espacios con velas, Nosotros recurrió a quienes saben del tema. Dialogamos con Graciela Real, profesora de los talleres que ofrece El Rincón de Susana, quien nos brindó una serie de herramientas claves, a la hora de utilizar parafina como materia prima de la decoración.

Sobre su origen, contó que las velas comenzaron siendo, estrictamente, objetos de iluminación. Ya en el siglo XIV puede hablarse de un uso generalizado de la vela que, cuando es tomada por la nobleza, comienza a lucirse en los candelabros. Esto significó que la vela pase a convertirse en un elemento de lujo.

En la actualidad, las velas en su sorprendente diversidad son -además de objetos de iluminación- elementos de decoración. Existe en el mercado una infinidad de velas que, además de variar en relación con los tamaños, formas, colores y motivos, permiten darle al hogar un toque de originalidad y modernidad plena.

Sin embargo, cada una de ellas posee un significado propio, tanto en relación a la forma y color, como a la intención de la persona que la encenderá; puesto que las velas brindarán a los ambientes desde climas cálidos hasta ambientes para la seducción.

La parafina es la base fundamental de estos objetos que, como afirma Graciela Real, bien podrían reconocerse como artesanías.

Se trata de un elemento muy versátil que permite infinitas posibilidades de creación, ya que el resultado final, es decir la forma de la vela, sólo dependerá del molde que se haya elegido.

Otra opción es la parafina en gel, muy transparente en su aspecto, que generalmente es presentada en envases de vidrio. Esto ofrece la posibilidad de conjugar diversos materiales, como por ejemplo caracoles, piedras y flores secas.

"La parafina en gel le da al ambiente un toque diferente. Es transparente y eso permite ver lo que le pongas por dentro", señaló Graciela, y explicó que dicho elemento puede ser autoportante y ser utilizado para desmoldar.

Aunque las velas en sus orígenes se crearon únicamente para iluminar hogares, en la actualidad se pueden emplear como parte de la decoración de una casa, en la barra de un bar, en una fiesta, un spa o en las mesas de un restaurante. Sólo es cuestión de elegir bien cuál se va a emplear, teniendo en cuenta la ocasión. Para ello, considerá estas múltiples opciones:

Lo visual y lo intuitivo está vinculado a esta artesanía. Por ello, los colores tienen mucho que ver a la hora de lucir velas en un ambiente.

Es la llama la que le da vida y presencia a una vela. Es que, como señala la artesana, es ese parpadeo y esa luz tenue que va y viene constantemente, la que juega e influye en el romanticismo y en esa oportunidad de ofrecer algo distinto.

Más allá de la veneración de algunos cultos -para lo cual se la emplea-, lo cierto es la vela tiene una infinidad de sentidos, ya que utilizarla como objeto de decoración no es lo mismo que hacerlo como una herramienta de luz. Por ello, tener en cuenta el propósito de quien la enciende es clave. De cualquier manera, la magia de la vela, sea cual sea su fin, está siempre.

No elegir recipientes que sean combustibles para colocar las velas, así como guardarlas en lugares fríos, oscuros y secos para que no se deformen ni pierdan el color, son las recomendaciones de Graciela para que tus artesanías luzcan siempre en buen estado.

También indicó que antes de utilizarlas en alguna velada, es aconsejable encenderlas y apagarlas unos minutos antes, para que ningún imprevisto arruine el acontecimiento.

"También es importante, para que no se derrame la cera, situarlas en aquellos lugares donde no haya corriente de aire. Otra opción, para evitar eso, es comprobar que la mecha no sea demasiado larga", puntualizó.

Por último, resta decir que hoy las velas se han convertido en un elemento decorativo indispensable; por ello, existe una amplia gama de modelos y colores que permiten darle a los hogares un toque mágico y personal.

que las velas pueden utilizarse como complemento de la decoración. Por ello, podés situarlas sobre un mueble para que sean un detalle del mismo.

que un ambiente, con sólo tres almohadones y una mesa, puede estar perfectamente decorado con fanales. En ello, juega mucho tu poder de imaginación y de creatividad.

y prestá atención en las medidas de seguridad para evitar incendios. La manera más efectiva de hacerlo es que cada cinco minutos vayas al lugar donde colocaste la vela y certifiques que todo esté bien.

que en el mercado tenés una gran variedad de estas artesanías para elegir. De cualquier manera, con parafina derretida y el molde que más te guste, podrás hacerlas con tus propias manos.