El bloque de concejales del oficialismo -Sergio Ripoll, Silvia Zuanet y Gerardo Silvestri- ha presentado en el cuerpo legislativo local un proyecto de ordenanza, relacionado con la prestación del servicio de coches remises, a partir de considerar que es necesaria una actualización de dicha normativa. En tal sentido, creen que se debe conformar un texto único, que contenga todas las modificaciones que con el tiempo se produjeron sobre la redacción original.

Atento a ello, en recientes expresiones relacionadas con el tema, Ripoll señaló que "resulta procedente que se incorporen determinadas responsabilidades a cumplimentar por parte de las agencias", sabiendo que las mismas tienen como sustento y antecedente un acta-acuerdo rubricada entre el Concejo Municipal y las prestatarias locales en el mes de abril de 2005.

"Las primeras ordenanzas que regularon en esta materia exigían que las empresas prestatarias contaran con un capital inicial que sustente el riesgo empresario, por lo que se creía conveniente que las mismas fueran propietarias de un mínimo de vehículos a los fines de la habilitación", resaltó también Ripoll, para luego aclarar: "Si bien este concepto se mantiene con respecto a las primeras 10 unidades -teniendo en cuenta la realidad económica y la forma de capitalizarse en la actualidad-, es conveniente requerir a los titulares de agencias que cuenten con una determinada solvencia acreditada, pero no con la titularidad del 30 % de todas las unidades que posean, sino con una póliza de seguro de caución".

"Algunas disposiciones de la legislación vigente han caducado -en razón de que consistían en plazos de adecuación ya fenecidos-, por lo que su existencia deviene en innecesaria y se aconseja su eliminación de la norma propuesta", continuó describiendo el concejal. Por eso mismo, cabría destacar que dentro de las modificaciones propuestas está la que dispondría que los móviles no puedan tener una antigüedad superior a siete (7) años, a diferencia con lo que ocurre actualmente, puesto que tal exigencia es de diez (10) años.

Otro ejemplo abarcado ha sido el del mal tiempo. Al respecto, el texto propuesto indica que "en días de lluvia, o inmediatamente posteriores a las mismas, las empresas podrán pactar con el cliente un determinado recorrido o establecer el límite de la prestación del servicio -en cuanto al trayecto a desarrollar-, en razón del estado de intransitabilidad que puedan presentar determinadas arterias de la ciudad".

Además, se especifica que deberán recepcionar, en todo momento, las llamadas telefónicas que reciban en su base, solicitando el servicio; en caso de no poder prestarlo, indicarán el motivo o la razón que así lo justifique. Y de no ser suficientes las unidades disponibles, se dará a conocer el tiempo de demora para satisfacer la solicitud. Asimismo, "queda expresamente prohibida la utilización de aparatos que determinen el costo de la tarifa de manera dispar a la prevista en la ordenanza específica".

Por último, se confirma que las agencias que desean prestar el servicio deberán presentar la correspondiente solicitud a la Oficina de Inspección y Registro. Atento a ello, además de los requisitos existentes, tendrá que poseer una "póliza y cuota mensual abonada de un seguro de caución, equivalente al 20 % del valor de la flota".

En la propuesta de Proyecto 2000, queda claro que las empresas de remises deberán prever que un número mínimo de vehículos se encuentren siempre disponibles, a los efectos de garantizar la prestación del servicio. Para ello, de prosperar esta iniciativa, sería aplicado el cronograma que se detalla a continuación: de 7 a 14 y de 16 a 21, el 60% de las unidades; de 21 a 6 y de 14 a 16, el 25% de las unidades; en días feriados o inhábiles, de 8 a 21 y el 50% de las unidades a disposición del usuario. Atento a ello, las empresas le entregarían a la autoridad de aplicación el cronograma -en forma mensual-, detallando las unidades encargadas de cubrir los horarios establecidos.