Escuela Raimundo Peña

Clausuran provisoriamente un comedor escolar por las ratas


Durante 15 días permanecerá cerrado por desinfestación. Por ahora, los alumnos almuerzan por tandas en el patio techado. El comedor y la cocina funcionan en una construcción vieja y desmejorada.

El comedor y el sector de cocina de la escuela N° 821 Raimundo Peña debieron ser clausurados provisoriamente porque están infestados de roedores. Como consecuencia, alrededor de 700 alumnos recibieron la semana pasada una dieta fría, a pesar de las bajas temperaturas.

Desde este martes, por disposición de la Región IV de Educación, los chicos volvieron a almorzar un menú caliente, gracias a que los alimentos se cocinan en otra escuela y se trasladan a este establecimiento a diario.

De todas formas, las condiciones no son las mejores ya que los comensales deben esperar su turno para almorzar. Se colocaron mesas en el patio techado de la escuela, donde sólo hay espacio para dar de comer a tandas de cien chicos.

"Esto alteró todo el funcionamiento de la institución porque se levanta y se vuelve a servir la comida 6 veces. El horario de comedor se extiende más de lo habitual, hasta las 14 horas", se quejó Norma de Ferreccio, a cargo de la dirección de la escuela Raimundo Peña, ubicada en Blas Parera al 5900.

El sector afectado permanecerá clausurado por 15 días, mientras se realiza la desinfestación.

La semana pasada, personal no docente detectó excrementos de roedores en las bachas y pisos de la cocina, donde se almacenan y preparan los alimentos para los alumnos. "Hasta fueron vistas algunas ratas", dijo Ferreccio. Como medida preventiva y para preservar la salud de los estudiantes, decidió cerrar el comedor y servir una dieta fría.

No es la primera vez que estos animales hacen su aparición por la escuela. En mayo de este año, se había desratizado, pero aparentemente la medida no resultó suficiente para mantenerlos alejados.

Malas condiciones

Ferreccio supone que debajo del inmueble había pozos negros y que las ratas podrían estar ingresando por las rejillas de la cocina. Además, hay un basural cercano y una de las medianeras está cubierta por vegetación del lado del vecino. Por todo esto, los desagradables animales -portadores de enfermedades- podrían estar ingresando a través de los vidrios rotos de los ventiluces.

En la cocina, se puede apreciar la falta de refacción y la precariedad de las instalaciones: bachas viejas de cemento, pisos gastados, maderas raídas que hacen las veces de alacena, equipamiento obsoleto.

Es que la edificación que alberga al comedor y la cocina escolar forma parte del sector más antiguo y menos mejorado del establecimiento, y está ubicado en la vieja casona de don Raimundo Peña, construida para vivienda particular a principios de siglo.

"Es un inmueble muy viejo, sin mejoras en infraestructura", se quejó la directora, que considera que la solución de fondo sería trasladar el comedor a un espacio que goce de mejores condiciones.

Proyecto

La comunidad educativa presentó un proyecto ante el MEC en el año 2002 para hacer un enroque con el Taller de Educación Manual que funciona dentro del predio escolar con salida propia por Lavaisse. Se trata de una edificación más moderna.

"Proponemos que el comedor se mude allí, y que este local sea refaccionado para albergar el taller", dijo Ferreccio, quien aseguró que así se vería resguardada la integridad física de los chicos. Además de las malas condiciones edilicias, el comedor actual está ubicado en la parte posterior del establecimiento, sin salida inmediata a la calle. De ocurrir un incendio, los alumnos deberían transitar varios metros hasta el exterior, sorteando pasos que están enrejados.

Por ahora, "la actual directora regional se comprometió a estudiar una solución: o remodelar el comedor o trasladarlo. Como comunidad educativa, preferimos la segunda opción", cerró la docente.

Promesa incumplida.

Desde hace 3 ó 4 años, la EGB Raimundo Peña comparte el edificio con los adolescentes de la escuela de polimodal N° 326 Patriarca de la Federación. "Supuestamente era una medida temporaria pero pasaron varias directoras regionales y ninguna se hizo cargo de esa promesa. Nos quitó espacio para la dirección, hay grados que funcionan juntos, y además no es ideal que estén circulando adolescentes por el mismo lugar donde hay chiquitos de primer año", reclamó Norma de Ferreccio.

De la redacción de El Litoral