El cuerpo sin vida de Santos Cáceres, quien tenía 59 años, apareció flotando ayer aguas abajo de la laguna Setúbal, a la altura de los tanques de almacenamiento de combustible de la petrolera Shell que están en el puerto local, del lado de la costa del distrito costero de Alto Verde.
Agentes de la seccional subcomisaría 5ta de Alto Verde, tomaron conocimiento de que había un cuerpo humano flotando en la orilla.
Recuperaron el cuerpo del agua acercándolo a la costa y lo trasladaron al apostadero donde aguardaban familiares de los dos hombres que permanecen desaparecidos desde el jueves 18.
Dicha jornada el bote de pesca en el que navegaban dio una vuelta de campana y desapareció de la superficie de la Setúbal a la altura de la denominada Playa Norte, presuntamente por el oleaje producido por el fuerte viento desatado sobre la laguna durante la tormenta de aquel día.
En las últimas horas los familiares de Santos Cáceres lo identificaron. Con posterioridad, los médicos forenses comprobaron que la causa de la muerte fue asfixia por inmersión y la justicia entregó el cuerpo a los familiares para que sea inhumado.
El cuerpo de la víctima recorrió varios kilómetros desde la zona de Playa Norte, pasando por debajo de los puentes Colgante y Oroño, hasta aparecer frente al puerto local, según lo confirmó el jefe de Operaciones de la Prefectura local, Juan Haunau.
Por su parte, los familiares del otro pescador desaparecido, Luis Carlos Lara, de 51 años, continúan esperando alguna novedad sobre su paradero. La aparición sin vida de su compañero, Cáceres, hace presumir que Lara podría haber sufrido la misma desgracia.
