Finalmente, luego de muchos anuncios, el Senasa abrirá sus puertas en Santa Fe para trabajar de manera regionalizada. La flamante Regional será la primera de las once que la entidad nacional piensa implementar a lo largo del país aplicando esta nueva metodología.
La idea surgió luego de muchos años, en los cuales quedó de manifiesto la necesidad de ir dotando a las provincias de una mayor autoridad a la hora de tomar decisiones que solucionen los problemas típicos de cada región, poco de los cuales se sabe en algunas oficinas de Avenida Paseo Colón en la Capital Federal.
Este concepto, loable por cierto, se encontró con no pocas dificultades para su implementación, ya que implicaba el traslado de potestades hacia el interior provincial en detrimento de ciertos estamentos más burocráticos que operacionales.
Afortunadamente la idea fue tomando fuerza, creciendo con el apoyo de los trabajadores del interior y del actual titular de la entidad Jorge Amaya, para quien este concepto estuvo claro desde el comienzo de su asunción al cargo.
La entidad operará con cuatro dependencias que se subdividirán en cuatro áreas: Sanidad Animal, Fiscalización Agroalimentaria, Apoyo Técnico Administrativo Legal y Técnico, y la flamante dependencia de Protección Vegetal, con el determinado propósito de luchar contra algunos males puntuales y nocivos como el picudo algodonero, y en la regulación de viveros a través de convenios con el gobierno provincial.
La idea es mejorar la calidad de los servicios ofrecidos en el interior del país, trasladando acciones del servicio central para facilitar la acción del mismo. Ahora las acciones del Senasa central se referirán a la parte normativa y de auditoría de las regionales.
El Senasa cumple un rol vital en la calidad y sanidad de la generación de agroalimentos, en la aprobación de plantas de todo tipo, la habilitación de remates feria, de lavaderos de camiones, la inscripción de viveros, etc. Nuestra provincia desde el año 1.999 ha creado una buena relación de trabajo, en una gran interacción con los gobiernos provinciales y comunales, factor clave para facilitar el camino a l regionalización, en cuanto a la interacción del recurso humano y operativo.
En tres días llega Felisa Miceli a Santa Fe para el corte de cintas y las fotos oficiales. A partir de allí, todos los ojos estarán puestos en el desempeño de esta nueva mecánica que habilitará a los santafesinos a resolver nuestros problemas sanitarios sin tener que consultar a Buenos Aires. Por fin el gobierno nacional llega a una decisión que aplica el federalismo y facilita el ejercicio del organismo. Pero no fue fácil conseguirlo. Costó años de trabajo en dependencias indignas, transitando los caminos y hablando con los productores e industriales. Esperemos que quienes desempeñen ahora estas funciones sepan demostrar que la decisión estaba justificada y estén a la altura del desafío que esta nueva etapa encierra.
