Irrumpe la época de los biocombustibles. El mundo, que necesita de este germen alternativo de energía, precipitó su apogeo motivado por la problemática petrolera, la escasez del gasoil y la presencia ciclópea de la República China que. Desde la óptica del abastecimiento y con casi el 25% de la población mundial necesita de las materias primas que ofrece el mercado mundial y, ecología mediante, por la avanzada degradación ambiental que padece el universo por el efecto invernadero.

Los combustibles de la vida afrontarán las derivaciones de un vertiginoso cambio en el escenario futuro. Bioetanol, biodiésel y biogás, son las variantes energéticas provenientes de materias primas de origen agroindustrial, agropecuario o de desechos orgánicos.

Sin embargo, este nuevo desafío necesita de una planificación estatal y apoyatura tecnológica, ya que producimos maíz y sorgo que son necesarios para el desarrollo del etanol, además del aceite vegetal como materia prima del biodiésel.

Es incuestionable la capitalización de las tierras debido al valor que adquirirán los cultivos involucrados que, a su función de rotación, agregarán las derivaciones de los nuevos residuos que mejorarán, por ejemplo, los rindes feedloteros y tamberos.

Pero, además de esta dimensión granaria, las explotaciones rurales tendrán que seguir con la evolución ganadera, agrícola y forrajera, que demandará programar las áreas dedicadas a cada emprendimiento. Ya que esta situación se verá favorecida por ser receptores de la formación de precios internacionales.

El primer paso se ha dado con la promulgación de la Ley 26.093 que establece estímulos promocionales para fomentar la elaboración de "combustibles verdes".

Por esta razón, entre otros, se darán beneficios por quince años que están relacionados a desgravamientos impositivos para quienes se dediquen a este tipo de usufructo. Los bienes de capital adquiridos para este objetivo podrán ser amortizados en forma acelerada o devueltos como anticipo en el IVA, no integrarán la base impositiva para determinar la Ganancia Mínima Presunta, estarán exentos de la Tasa de Infraestructura Hídrica y a partir del año 2010, el gasoil y la nafta contendrán un 5% de biodiésel y bioetanol, respectivamente.

Poseemos extensas superficies aptas para el crecimiento oleaginoso y 40 millones de toneladas nos catapultan como uno de los líderes mundiales en la exportación de este vital insumo.

Sin embargo, ante este nuevo contexto, no habrá que perder de vista el incremento que se suscitará en la renta agraria, una discusión medular injustificadamente postergada.