La falta de información es el principal obstáculo para quienes tienen enfermedades de hipófisis. La mayoría de los casos pueden tratarse con éxito. Pero los afectados y los profesionales coincidieron en que es preciso mejorar el conocimiento.
De la redacción de El Litoral
Los tumores de hipófisis -glándula ubicada debajo del cerebro-, que causan enfermedades como acromegalia o gigantismo (crecimiento desmesurado y desproporcionado), hiperprolactinemia y enfermedad de Cushing, pueden ser tratados exitosamente si se diagnostican a tiempo.
Sin embargo, actualmente sigue habiendo un gran obstáculo para llegar a un buen término: el desconocimiento que existe en la población acerca de esta temática. Así lo afirmaron destacados especialistas durante el Primer Encuentro Anual de Pacientes con Enfermedad de Hipófisis, organizado por la Asociación Ayuda a Pacientes con Enfermedad Hipofisaria (Apehi).
El Prof. Dr. Armando Basso, director del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Buenos Aires, señaló que "luego de cuatro décadas de superar desafíos hemos llegado a una etapa sorprendente en avances para tratar la enfermedad hipofisaria y beneficiar a los pacientes, la principal traba del presente es la falta de información".
Por empezar, la mayoría de las personas ignora cuáles son los síntomas. "Varían según el tipo y tamaño del tumor", comentó la Dra. Mirtha Guitelman, médica neuroendocrinóloga del Servicio de Endocrinología del Hospital Durand y asesora científica de Apehi. "Es por ello que casi siempre el paciente tarda en acudir al neuroendocrinólogo. Por ejemplo, en las mujeres, el prolactinoma suele ser detectado por el ginecólogo, ya que causa trastornos menstruales. En los hombres produce disfunción sexual, por lo que no se consulta tanto, y en general los casos nos llegan derivados por un neurólogo o un clínico, cuando el tumor ya es más grande y los trastornos son mayores".
La otra gran falencia de información se da a nivel jurídico. Gran cantidad de pacientes no sabe que la obra social o la prepaga tienen la obligación de costear los tratamientos en forma integral.
En este sentido, la Dra. María Inés Bianco, abogada especializada en Aspectos Legales de la Discapacidad y asesora legal de Apehi, declaró que "la salud es un derecho humano, garantizado por la Constitución Nacional, y todos tienen derecho a ella. En el caso de enfermedades de hipófisis, que son consideradas de baja incidencia (poco frecuentes) y alto costo, la cobertura debe ser del 100%. E incluso si la persona no cuenta con cobertura médica, debe acceder igualmente al tratamiento, porque no hay un derecho mejor que otro. La vía por excelencia para reclamar un derecho es la judicial".
