Un musical cuenta su vida
Gardel regresa a Nueva York
La ciudad que quedó embrujada con la voz del mítico cantante podrá apreciar un montaje lleno de pasión y tango.

Ruth Hernández Beltrán-EFE

Carlos Gardel sigue generando pasiones y siete décadas después de su muerte regresa a Nueva York en un espectáculo para conquistar al público de una ciudad que en vida del cantante argentino quedó embrujada con su voz.

"Gardel, el musical" es un montaje lleno de pasión y tango en el que diez actores y bailarines recrean a Gardel, la relación que mantuvo con su madre y su idilio con Isabel del Valle, durante catorce años compañera sentimental de quien acabó convertido en una leyenda.

El actor puertorriqueño Miguel Ramos dará vida al mítico artista en un espectáculo que marca el retorno tras doce años de los musicales al Repertorio Español, el único teatro de Nueva York que ofrece de manera permanente obras en la lengua de Cervantes.

Ramos llega a la ciudad de los rascacielos tras presentar en 2004 el mismo montaje en Puerto Rico, donde alcanzó gran éxito con su interpretación del cantante de la inolvidable sonrisa.

Escrita por el también boricua Eladio Cintrón, "Gardel, el musical" muestra aspectos trascendentales de la vida de Charles Romuald Gardes, a quien el mundo conoció como Carlos Gardel.

Personaje misterioso

"Todos los actores en un momento dado de nuestra carrera soñamos con un personaje" dijo a EFE Ramos, quien subrayó que "Gardel era un personaje muy misterioso, bohemio y que también tiene un trasfondo histórico que lo acompaña".

El actor recordó que la progenitora del cantante "tuvo que escapar de Francia porque ser madre soltera era un delito en aquella época. La madre de Gardel aprovechó el gran momento de la emigración europea para venir a América".

El actor destacó también que parte del misterio que se ha tejido en torno de la leyenda que aún rodea a Gardel se basa en su incierto lugar de nacimiento, aunque documentos históricos apuntan a Francia como el país en que vio la luz un 11 de diciembre, según algunas versiones fue el de 1890 y, según otras, el de 1896.

Tras meses de estudiar la figura de Gardel, de escuchar su extensa obra musical y ver sus películas, la mayor preocupación de Ramos es cómo satisfacer a una audiencia que sigue venerando al cantante argentino como a un mito.

"Toda la información que recopilamos nos permitió ir uniendo piezas, aunque teníamos que decidir sobre la cantidad de canciones y cómo íbamos a complacer al público", argumentó el actor.

"Decidimos hacer un espectáculo musical que recogiera momentos trascendentales de la vida de este hombre, enmarcados en la musicalidad del tango. Lograr componer este personaje ha sido muy interesante para mí como artista", señaló.

Los seguidores del "Morocho del Abasto" disfrutarán en el montaje de quince temas -incluidos "Volver" y "El día que me quieras"-, trece de ellos interpretados por Ramos, bajo la coreografía de Ricky Vázquez y Modesto Lacén.

No a la imitación

"Hacer Gardel es tal vez el momento más importante de mi carrera y el papel más difícil. Uno de sus grandes aciertos fue llevar el tango del arrabal al salón e internacionalizarlo", indicó.

No obstante, afirmó que su interpretación no se limita a una mera "imitación" del cantante argentino, muerto en 1935.

"Soy actor, no imitador. Este es un trabajo que para nosotros conlleva una gran seriedad. Hemos querido ser respetuosos, incluso con el acento, porque Gardel es inimitable", explicó.

"Me he preparado para esto considerando los matices, pero jamás imitando", sostuvo el protagonista de la obra, que comienza con la llegada de Berthe Gardez (apellido que el artista argentino luego cambió) con su hijo de dos años a Argentina, donde trabajaría de planchadora -ironías de la vida- en un teatro.