Israel triplica el número de soldados

La ONU pide cese del fuego, pero el conflicto se agrava

Tropas israelíes toman posiciones en una ruta en el sur libanés, tras cruzar la frontera. Foto: EFE. 

De uno y otro lado se atribuyen logros en el combate. Las fuerzas israelíes pretenden avanzar rápidamente hasta posiciones estratégicas en el sur de Líbano.

Pocas horas después de que el Consejo de Seguridad de la ONU adoptara por unanimidad una resolución reclamando un cese de hostilidades entre Israel y el Hezbolá libanés, el Ejército israelí triplicó el número de sus militares en acción tras el lanzamiento de una gran ofensiva terrestre.

"Hemos triplicado nuestras fuerzas en operación en Líbano" desde que el primer ministro Ehud Olmert dio la orden de lanzar una gran ofensiva terrestre contra el Hezbolá, afirmó el jefe del estado mayor israelí, general Dan Halutz.

El número de soldados que operaban hasta ahora en el Líbano era de 10.000, según el jefe del estado mayor quien precisó que ahora ha pasado a ser de 30.000 hombres.

Las fuerzas israelíes hicieron preceder el avance de sus soldados de bombardeos aéreos que causaron al menos ocho muertos civiles, mientras que el movimiento chiíta Hezbolá -que intentaba frenar las columnas de tanques hebreos, según la policía libanesa- lanzó unos veinte cohetes contra el norte de Israel.

Los soldados israelíes, asimismo, empezaron a acercarse este sábado al río Litani, la línea estratégica de la ofensiva del Estado hebreo en el sur del Líbano.

Israel había anunciado su intención de hacer retroceder a los milicianos de Hezbolá hasta el norte del Litani, un punto que le ha servido de `frontera' estratégica en cada una de sus incursiones en Líbano desde 1978.

Unos 30.000 soldados están implicados en la nueva fase de la ofensiva terrestre, que "no tienen límites de tiempo", según afirmó a la AFP un portavoz del gobierno hebreo.

"Conforme a la decisión (...) del gabinete de seguridad, el ejército israelí lanzó una operación terrestre en el sur de Líbano que debe extenderse hasta el río Litani", indicó el portavoz.

El gabinete de seguridad israelí aprobó el miércoles la extensión de las operaciones militares por tierra con una cobertura aérea y marítima.

En este contexto, la aviación israelí bombardeó desde el amanecer la localidad de Saida, en el sur de Líbano, causando tres muertos, y destruyó una central eléctrica, informó la policía libanesa.

Asimismo, otros cinco civiles murieron en otro bombardeo israelí contra Rachaf, una localidad a 20 kilómetros al este de Tiro, importante ciudad portuaria del sur de Líbano, informó la policía local.

Los aviones israelíes también bombardearon rutas de la meseta de Akkar, en el norte de Líbano, que conducen a Siria, según la misma fuente.

Los aparatos lanzaron bombas sobre una carretera costera que conduce al puesto fronterizo de Abdé, entre Líbano y Siria, a diez kilómetros al norte de Trípoli, la principal ciudad del norte de Líbano, precisó la policía.

Los aviones también lanzaron misiles sobre una ruta secundaria que une la localidad de Queissat a Siria.

Los otros dos bombardeos apuntaron contra caminos más al este en Akkar, utilizados por los contrabandistas que operan entre Líbano y Siria.

Sector controlado

Según la radio pública israelí, tanques y militares penetraron en el sur de Líbano, en una zona que ya está controlada por las tropas hebreas.

"Esta operación, que tiene por objetivo neutralizar la capacidad de Hezbolá de disparar cohetes y misiles contra el norte de Israel, no está limitada en el tiempo", declaró Avi Pazner.

"Para nosotros no se ha decretado ningún alto el fuego. La resolución del Consejo de Seguridad la ONU debe, en primer lugar, ser aprobada el sábado por el gobierno libanés y el domingo por el gobierno israelí antes de poder iniciar las conversaciones sobre las modalidades, sobre todo, en cuanto al momento en que (el texto) debe entrar en vigor", agregó el portavoz.

La resolución

Los quince miembros del Consejo de Seguridad de la ONU respaldaron un texto elaborado por Francia y Estados Unidos pidiendo "un cese total de las hostilidades" entre Israel y la organización chiíta Hezbolá que durante un mes han maltrecho el Líbano.

La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, presente en la sesión y en la recta final de las negociaciones con Francia para ultimar el texto, dijo que la resolución "abre las puertas a una paz duradera".

Por su parte, el presidente francés Jacques Chirac saludó la resolución y aseguró que las tropas de Francia participarán de la fuerza multinacional prevista.

Sin embargo, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, lamentó la demora en aprobar la resolución. "Faltaría a mi deber si no les dijera que estoy decepcionado de que el Consejo no haya tenido éxito mucho, mucho antes", declaró Annan ante los ministros y embajadores de los 15 países miembros.

La resolución pide un "cese total de las hostilidades basada, en particular, en el cese inmediato por Hezbolá de todos los ataques y en el cese inmediato por Israel de todas las operaciones militares ofensivas".

"Después del cese total de las hostilidades, exhorta al gobierno del Líbano y a la Fuerza Interina de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) a que (...) desplieguen en conjunto sus fuerzas en toda la región meridional y exhorta al Gobierno de Israel a que, una vez iniciado ese despliegue, retire todas sus fuerzas del Líbano meridional en forma paralela", agrega.

La resolución reclama también la liberación de los dos soldados israelíes capturados por Hezbolá el 12 de julio, cuando comenzó este conflicto.

AFP/EFE