En plena Recoleta
Investigan sangriento crimen de una ex docente jubilada

Dolor La conmoción entre conocidos y familiares de la víctima se acentuó esta mañana durante el último adiós. Foto: Danilo Chiapello. 

El homicidio se cometió en el interior de un departamento céntrico. No había violencia en la puerta, ni señales de robo. La policía tiene a dos hombres detenidos.

Redacción de El Litoral

Una ex docente -actualmente jubilada- perdió su vida como consecuencia de las graves lesiones con que resultó tras ser atacada por un sujeto en el interior de su céntrico departamento.

El grave suceso fue descubierto ayer, minutos después del mediodía, y tuvo lugar en un pequeño complejo de departamentos ubicado sobre Rivadavia 3260, esto es, en el corazón de la zona conocida como Recoleta santafesina.

La víctima fue identificada como Graciela Antonia de Filippis, de 60 años, la que fue encontrada ya sin vida en el baño del inmueble y con inequívocos signos de haber sufrido una agresión.

De acuerdo a los primeros informes una amiga de la infortunada fue quien se topó con la macabra escena. Ocurre que varias horas antes había estado intentando comunicarse por teléfono y, al no obtener ningún tipo de respuesta, decidió acudir personalmente.

Señales

Segundos después de trasponer la puerta de ingreso, la amiga tuvo en claro que algo muy malo había pasado en el interior de ese departamento N° 1. Manchas de sangre se observaban en distintos sectores.

Así llegó hasta la puerta del baño y se topó con lo peor. En el piso yacía sin vida la señora Filippis.

El cuerpo presentaba un profundo corte en la zona del cuello, con predominio en el lado izquierdo, además de otras heridas punzantes y cortantes en otras partes.

De inmediato se dio el aviso a la policía y los pesquisas de la sección Homicidios tomaron cartas en el asunto.

Conocido

Tras los primeros trabajos se tuvo la certeza que quien ultimó a la mujer pudo acceder al departamento sin ejercer ningún tipo de violencia. No había daños en puertas ni ventanas. Además no había ningún tipo de desorden con los mobiliarios.

Estos datos resultan de real significación para los investigadores que a la hora de trazar una primera hipótesis sostienen que el matador podría ser un conocido de la víctima.

Asesino silencioso

Además si bien el caso se conoció ayer a la tarde se estima que el crimen se cometió en las primeras horas de la mañana. En este sentido el médico que intervino dictaminó que el deceso databa de unas cuatro a cinco horas aproximadamente.

Para esta parte llamó poderosamente la atención a los pesquisas el hecho de que nadie haya advertido la presencia de alguna persona extraña o no habitual en los movimientos del complejo. Tampoco nadie escuchó ruidos ni gritos.

A partir de entonces peritos especializados trabajaron en el departamento desde donde se supo que se incautaron del arma homicida. Es un cuchillo de cocina, tamaño mediano. Tan furibundo debió haber sido el ataque que el mango estaba quebrado.

Detenidos

Con estos y otros datos los policías comenzaron a rearmar los últimos movimientos de la mujer. Se puso especial atención a las personas que recientemente habían entrado en contacto con la víctima.

Al cabo de distintos cruces de llamadas las sospechas recayeron en dos hombres, de 59 y 60 años. Uno de ellos es un empleado municipal en actividad, y el restante es un vendedor autónomo.

Ambos fueron ubicados por los uniformados. A partir de ahora los hombres deberán explicar la tan temida pregunta: "¿Dónde estaba usted y con quién la mañana del lunes?".