El regreso de Alfio Basile a la dirección técnica del seleccionado argentino de fútbol se inició ayer con una nítida goleada de Brasil por 3 a 0, en un partido amistoso que se jugó ante 59.032 personas en el Emirates Stadium de Londres, propiedad del club Arsenal.

Argentina sufrió dos tantos calcados de Elano, a los 3 minutos del primer tiempo y 22 del complemento, y un golazo de estirpe "maradoniana" convertido por Kaká, cuando restaba un minuto para el final.

El equipo de Basile, que pagó caro su estreno ante un rival de jerarquía, mostró fragilidad en la estructura defensiva y poco vuelo futbolístico en ataque pese a la presencia de Juan Román Riquelme, Lionel Messi y Carlos Tevez. Además, la falta de trabajo que advirtió el "Coco" apenas se calzó el buzo del seleccionado argentino quedó expresada a los 3 minutos, con la apertura del tanteador para Brasil, después de una gran habilitación de Robinho y un derechazo de Elano -Daniel Bilos perdió su marca- al primer palo de Roberto Abbondanzieri.

Un instante antes, Luis González tuvo el gol para la Argentina en un tiro libre ejecutado por Juan Román Riquelme, en el arranque de un clásico intenso y poco amistoso. Brasil impresionó más por la mayor precisión del toque de pelota en la zona media y la habilidad de Robinho, clave para capitalizar el desajuste argentino entre defensores y volantes. Por su parte, Mascherano lució desorientado por la falta de marca en los carriles, y su despiste provocaba la peligrosa salida de los zagueros.

Sin la pelota, el partido se convirtió en un problema para Tevez y Messi, en desventaja para pelear pelotas divididas con los corpulentos centrales brasileños. Basile, de impecable traje, dejó su silla y llegó hasta la línea del "corralito" para ajustar detalles, mientras se tocaba la cara en señal inequívoca de preocupación. Dunga, en cambio, permanecía sentado.

El partido tenía toque y aceleración por parte de Brasil y confusión del lado argentino, sobre todo por el costado izquierdo de la defensa, donde Cicinho, Elano y Robinho triangulaban con peligro. El grito estentóreo de "Brasil" atronaba en la cancha a los 27 minutos del juego y, en ese instante, Tevez lo acalló con un cabezazo que casi se transforma en el empate, después de una proyección de Clemente Rodríguez.

Robinho ensayó su clásica "bicicleta" en el área, 2 minutos después, y dejó desairado a Fabricio Coloccini, pero a su zurdazo tapó Abbondanzieri.

Lo que mostró Argentina en el comienzo del segundo tiempo fue un mayor orden y control de la pelota, aunque poca profundidad por la escasa gravitación de Messi, propenso a la jugada personal. Cuando el rosarino entendió que saber del juego también es desprenderse del balón en el momento preciso, su clase marcó diferencia y generó dos chances claras para el empate. Ambas asistencias fueron para Luis González y una de ellas terminó con un disparo cruzado de Pablo Zabaleta, el más regular de Argentina.

Pero Brasil convirtió el segundo tanto con papel carbónico. Kaká emprendió una diagonal de izquierda al centro, habilitó a Elano por la derecha, Bilos nuevamente lo corrió de atrás y el volante amplió el marcador con un derechazo cruzado.

Poco margen anímico y futbolístico le quedó al equipo para que Agüero -ingresó a los 21 del complemento- demuestre su indiscutida clase de crack naciente. El partido, ya sentenciado, le permitía algunos lujos a los brasileños y, por qué no, las clásicas provocaciones de Robinho cuando su equipo está en ventaja.

Sobre el final, y para darle matiz de fiesta brasileña, Kaká anotó un golazo y desató el delirio de la cancha. El volante arrancó desde su campo, Messi lo persiguió desganado durante 40 metros y lo soltó, entonces eludió la marca de Milito y definió por debajo del "Pato". Demasiado para un estreno rápidamente olvidable.

Argentina: Abbondanzieri; Zabaleta, Coloccini, Milito, Rodríguez; González, Mascherano, Bilos, Riquelme; Messi y Tevez.

D.T.: Alfio Basile.

Brasil: Gomes; Cicinho, Lucio, Juan, Gilberto; Elano, Gilberto Silva, Edmilson, Carvalho; Fred y Robinho.

D.T.: Dunga.

Goles: en el primer tiempo, a los 3 min. Elano (B). En el segundo tiempo, a los 22 min. Elano (B) y a los 44 min. Kaká (B).

Cambios: en el segundo tiempo, al comenzar, Somoza por Mascherano y Samuel por Rodríguez (A); a los 14 min. Kaká por Carvalho (B); a los 21 min. Maicon por Cicinho (B) y Agüero por Tevez (A); a los 23 min. Alexandro Souza por Edmilson (B); a los 27 min. Insúa por Bilos; a los 28 min. Baptista por Elano (B); a los 35 min. Wagner Souza por Fred (B) y a los 44 min. Rafael Sobis por Robinho (B).

Árbitro: Steve Bennett (Inglaterra).

Estadio: Emirates Stadium (Arsenal).

Público: 60 mil espectadores.

El entrenador del seleccionado brasileño, Dunga, manifestó que con el triunfo de su equipo sobre Argentina "ganó el fútbol", al remarcar la categoría del rival al que derrotó.

"Argentina es una gran selección, pero ganó el fútbol. Más allá del bellísimo gol de Kaká (anotó el tercero), me gustó el buen juego en general del equipo, el dribbling, el toque, la determinación y el entusiasmo que mostró por encima de cualquier táctica. Rescato de todos la buena voluntad para jugar", expresó un reconfortado Dunga.

"Cuando ellos (por el equipo de Alfio Basile) se decidieron a jugar, se nos hizo difícil. Pero debo confesar que siento cansancio pese a haber ganado 3 a 0. Recién comencé a darme cuenta de que soy el entrenador de Brasil y que a mi vida le faltaba esa adrenalina de ser director técnico", cerró.

En la mira.

Fernando Gago es un serio candidato a formar parte de las próximas convocatorias de Alfio Basile para el seleccionado, posiblemente ya cuando el mes próximo se juegue en Murcia un amistoso con España, pero por lo pronto seguirá un año más en Boca Juniors. Así lo anticipó el empresario Marcelo Lombilla, uno de los visitantes en la concentración argentina en Londres. "Por ahora no se irá a ninguna parte. Este año va a jugar en Boca, él está muy tranquilo y a gusto en el club", comentó el empresario.

El director técnico del seleccionado argentino, Alfio Basile, dijo que la goleada que Brasil le propinó a su equipo obedeció a que el rival tuvo una mayor eficacia. "No se discute el resultado, quizás sí la diferencia. Ellos tuvieron una contundencia tremenda y nosotros no. Argentina tuvo situaciones de gol, pero no las pudo convertir. Igualmente, lo más positivo de esta presentación fue que el equipo quiso atacar siempre", analizó Basile.

El actual entrenador de Boca Juniors advirtió que él había anticipado que su conjunto tenía "poco tiempo de trabajo" y admitió que "se notó dentro del campo de juego" del estadio Emirates, de Londres, donde se disputó el partido amistoso.

"Para que se sepa el equipo de memoria, como a mí me gusta, faltan días de trabajo. Pero en el fútbol es relativo saber cuánto lleva conseguir lo que uno quiere: puede lograrse al segundo día como demandar mucho tiempo", explicó.