Reconquista (De nuestra agencia). - Cada sábado, alternando Reconquista y Avellaneda, un grupo de pequeños productores de diferentes zonas rurales del departamento General Obligado, ofrecen en una feria, alimentos frescos y naturales que ellos mismos elaboran.

Hace 2 días cumplieron el primer aniversario desde que reiniciaron su actividad, que había sido suspendida años atrás debido a la crisis económica que afectó al sector productivo de todo el país.

Hoy, luego de unos meses, lograron una vez más que la calidad de sus productos sea reconocida por la comunidad.

En la coordinación y asesoramiento de todo este proyecto trabaja el PSA (Programa Social Agropecuario), quienes consideran que la feria es una vidriera para que los productores muestren lo que hacen y constituye para ellos un canal más de comercialización, económicamente les está dando sus frutos y además les permite relacionarse con sus pares y con la gente de la ciudad, que valora lo que hacen.

Para celebrar esta fecha tan especial, los pequeños productores agasajaron a sus clientes con una ambientación festiva de la feria, obsequiando globos y caramelos para los niños y, además, sortearon una canasta repleta de productos alimenticios elaborados artesanalmente.

Como es habitual, se ofrecieron a la venta alimentos sanos y frescos producidos en la zona: verduras y hortalizas, dulces, licores, miel, huevos de campo, quesos y panificados caseros, los cuales rápidamente tuvieron dueños.

Sofía Zordian es una pequeña productora de la zona de Las Catalinas, distrito Malabrigo, a unos 70 kilómetros de Reconquista, quien sábado a sábado, desde hace un año, viene en colectivo, bien temprano, para ofrecer sus productos.

"Vale la pena venir, porque uno hace clientes y también se hace compañeras con las otras feriantes", señaló.

En referencia a los productos que ella elabora dijo: "lo mío es lo dulce, licores, vino de pomelo, vino de mandarina y panificados". Luego detalló cómo hace el vino de pomelo y mandarina, algo muy novedoso: "se exprime la fruta, por ejemplo el pomelo, para 10 litros de jugo, 3 kilos de azúcar y se lo deja fermentar durante unos 45 días.

"Después se lo filtra y, si uno quiere, le pone un poco de azúcar negro al final, que le da un sabor y color diferente. Para el vino de mandarina, es el mismo proceso pero se le coloca menos azúcar".

Desde hace mucho tiempo, el Programa Social Agropecuario se encuentra trabajando junto al pequeño productor y el caso de los feriantes no es la excepción.

El asesoramiento y coordinación que realiza la entidad ha sido clave en el éxito que posee actualmente la Feria de Pequeños Productores.

Patricia De la Vega es una de las integrantes del PSA, responsable de este grupo de productores, quien expresaba lo siguiente: "este es el cumpleaños de la nueva etapa de la Feria de Reconquista, porque ya había funcionado en otra época, y lo dejó de hacer por toda la crisis que hubo en el país. Felizmente, por iniciativa de pequeños productores de la zona de La Potasa, Las Tunas y Montecarlo, surgió la idea de que la Feria funcione nuevamente".

Luego señaló que "la respuesta de la gente es cada vez mayor, y en esto tuvimos que tener paciencia, porque el mayor éxito está en el boca a boca, cuando los clientes vienen y empiezan a valorar la calidad de los productos, que fundamentalmente son frescos, que viene de manos de la gente que trabaja la tierra".

Los productos elaborados son totalmente caseros, naturales, y la gente comienza a valorar también el esfuerzo de la gente que trabaja y viene del campo a ofrecer sus productos, sostuvo la dirigente.