Argentina, Uruguay y sus argumentos ante el tribunal internacional
En La Haya los cortes de rutas relegan a la contaminación
Nuestro país respondió ayer a la primera presentación uruguaya por la interrupción de los pasos fronterizos. Hoy se produjo la segunda exposición oriental. La protesta de Gualeguaychú lleva cuatro semanas. Colón sigue con interrupciones periódicas y Concordia no tiene cortes.

De la redacción de El Litoral

La Argentina puso en duda la competencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, ante el pedido de Uruguay, para que el máximo tribunal internacional adopte medidas que conduzcan a nuestro gobierno a poner fin al corte de puentes entrerrianos con el vecino país, en protesta por la instalación de la pastera finlandesa Botnia en Fray Bentos.

La estrategia argentina apuntó a demostrar la inexistencia de relación alguna entre los cortes y la construcción de esa pastera. El fundamento fue que la cuestión de fondo que la CIJ aún tiene pendiente de resolución es decidir si Montevideo violó el estatuto binacional sobre administración del río Uruguay de 1975 cuando autorizó unilateralmente la instalación de Botnia y en su momento también de la española Ence.>

Hasta ahora, los esfuerzos argentinos por quitar a los cortes del temario principal han sido en vano. La Asamblea de Gualeguaychú lleva cuatro semanas impidiendo la circulación entre ambos países; Colón sigue con interrupciones periódicas, y Concordia no tiene cortes (aunque en una oportunidad dejó 45 minutos sin unión vial entre argentinos y uruguayos).>

Las posiciones, de acuerdo con agencias de noticias desde La Haya, fueron expuestas ayer en el primero de los dos días de audiencias convocadas ante el pedido de medidas cautelares que hizo Montevideo. La delegación argentina tiene al frente a la ex canciller Susana Ruiz Cerutti, mientras que la uruguaya la encabeza su embajador en Francia, Héctor Gros Espiell.>

"No hay ninguna relación entre este asunto (los cortes) y el fondo de la cuestión (la presunta violación del estatuto de 1975) sometida a la Corte", dijo Ruiz Cerutti, y recalcó: "No existe relación ni causalidad objetiva, por lo que no hay conexión con la jurisdicción de la Corte". Amplió el argumento el profesor de derecho internacional Marcelo Kohen, miembro de la delegación argentina: la demanda uruguaya "no cumple con ninguna de las condiciones del estatuto de la Corte", dijo, e ironizó al señalar que "esperamos toda la mañana (cuando expuso Uruguay) qué artículo del tratado de 1975 sería citado: no escuchamos ni uno".>

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"Amenaza de asfixia"

La postura uruguaya para reclamar ante la CIJ medidas cautelares urgentes se basó en "la pasividad y omisión" del gobierno de Néstor Kirchner ante los cortes. Sostuvo que el bloqueo "casi total" de los puentes ejerce una "extrema presión" para detener la construcción de la planta de Botnia y "amenaza con asfixiar la economía" uruguaya.

"Si Botnia parte, la Corte no tiene poder de hacerla volver", advirtió el martes el jurista escocés Alan Boyle, al justificar el "daño irreparable" que alega Uruguay, su demanda de medidas para poner fin a los cortes de ruta argentinos.>

La noción de "daño irreparable" es la más importante a la hora de justificar un pedido de medidas cautelares urgentes de la Corte, y por ello el equipo legal uruguayo utilizó su turno de la segunda ronda de alegatos en la CIJ para poner el acento en esta cuestión, que no había sido bien desarrollada el lunes.>

Para apoyar su demanda, Uruguay se refirió en varias ocasiones al fallo de la CIJ del pasado 13 de julio, que rechazó un pedido argentino de medidas provisorias para frenar el proyecto hasta que se determine si se violaron o no cuestiones medioambientales vinculadas con el Tratado del Río Uruguay de 1975.>

Para el país hermano ese fallo, que garantizó su "derecho al desarrollo sustentable" hasta que sea definida la cuestión de fondo, no es respetado por el gobierno del presidente argentino Néstor Kirchner que "aprueba" los cortes de ruta de los asambleístas de Gualeguaychú (ciudad argentina ubicada frente a Fray Bentos), utilizados como un medio de "extorsión económica".>