Israel transferirá a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) unos 100 millones de dólares congelados a los palestinos desde que Hamas llegó al poder a principios de año.
AFP-EFE
La primera reunión en seis meses entre el jefe del gobierno israelí, Ehud Olmert, y el presidente palestino Mahmud Abas, creó una esperanza para el paralizado proceso de paz en Medio Oriente, pero los observadores advirtieron hoy que no había que esperar mucho de este encuentro.
"Se acordó que después de esta reunión habrá otras, pues nosotros tenemos la intención de iniciar un diálogo para hacer progresar el proceso político con los palestinos", afirmó Olmert durante el consejo semanal de ministros.>
El gobierno aprovechó la ocasión para votar por unanimidad la transferencia de 100 millones de dólares a la oficina del presidente de la Autoridad Palestina anunciada ayer, durante su reunión.>
Esos fondos serán tomados de una parte de los aranceles y del impuesto al valor agregado descontados por Israel por cuenta de la Autoridad Palestina sobre los productos importados en Cisjordania y la Franja de Gaza. Esos fondos fueron congelados a principios de este año como sanción después de la victoria en las elecciones legislativas de los islamistas del Hamas y la formación, en marzo, de un gobierno bajo su dirección.>
El monto de los fondos congelados es de casi 1.000 millones de dólares, según una fuente israelí.>
No obstante, Olmert precisó que la transferencia de este dinero se hará por intermedio de un "mecanismo especial" que permita garantizar que los fondos no pasarán por los ministerios controlados por el Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámica, en el poder).>
Apoyo para Abas
Según la ministra israelí de Relaciones Exteriores, Tzipi Livni, esa reunión y ese gesto permitieron apoyar a Mahmud Abas, quien actualmente se encuentra enfrentado al Hamas debido a su intención de convocar a elecciones anticipadas.
"El pueblo palestino debe comprender que tiene dos opciones: la que existe actualmente con un gobierno terrorista que no puede satisfacer sus necesidades cotidianas y políticas, mientras que puede tener una alternativa capaz de tratar sus necesidades cotidianas y ofrecerle un horizonte político", declaró Livni a la radio del ejército.>
En cambio, el diputado del Likud (oposición de derecha) Sylvan Shalom consideró que Israel "alentará a la comunidad internacional, sobre todo a los europeos, a romper el embargo financiero impuesto a la Autoridad Palestina".>
Un comentarista político del canal 2 de televisión privado, Udi Segal, sostuvo, por su parte, que "ese encuentro es sobre todo una reunión entre dos dirigentes que se encuentran acorralados contra un muro".>
"Mahmud Abas recibió muchas promesas y algunas monedas", comentó el diario Maariv.>
Del lado palestino, el ministro encargado de los prisioneros, Wasfi Kabha, del Hamas, opinó que "esta reunión no fue más que una cortina de humo".>
"Abu Mazen (Mahmud Abas) y Ehud Olmert enfrentan una crisis interna y se reunieron únicamente para decir que esperan reanudar negociaciones", agregó este ministro.>
Un profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Bir Zeit de Cisjordania, Ali al Jarbawi, también se mostró prudente.>
"Es un primer paso, pero nosotros no sabremos si es importante antes de ver los resultados en la zona. El pueblo palestino quiere cosas concretas y no sólo entrevistas", añadió.>
Otro analista, Jani al Masri, destacó que Ehud Olmert no aceptó liberar prisioneros como lo solicitaba Mahmud Abas. "Olmert no dio nada tangible a Abu Mazen", añadió.>
Manipulación
El portavoz del gobierno palestino encabezado por el grupo islámico Hamas, Ghazi Hamad, calificó de manipulación política de Israel a la reunión celebrada anoche entre Olmert y Abas.
Hamad precisó que la reunión Olmert-Abas era una campaña de imagen ante la comunidad internacional destinada a ganar tiempo a cambio del alivio de restricciones triviales a los palestinos.
El portavoz palestino destacó que Israel no ha garantizado, por ejemplo, una de las demandas más importantes para los palestinos, como lo es la liberación de prisioneros, y que no transferirá "toda la cantidad de dinero perteneciente al pueblo palestino".
