Vicente Leónidas Saadi solía referir que Juan Perón le había enseñado que para montar una operación política ganadora, al estilo de un campo de batalla, se necesitaba contar con una importante dosis de buena información y además seguir al pie de la letra la teoría de las "Tres S": Seriedad, Secreto y Sorpresa. Hoy, Néstor Kirchner y Roberto Lavagna se muestran al respecto como dos excelentes alumnos del general.

Con su lanzamiento, el ex ministro de Economía movió el viernes el avispero político y puso en juego a pleno esta premisa táctica, ayudado además por la declinación informativa del verano. En estos días, la atención pública pasó sin escalas desde el dramatismo del caso Gerez y sus secuelas políticas, que hoy el gobierno trata de barrer prudentemente debajo de la alfombra, hacia un probable corte ambientalista en la Terminal de Buquebús y la movilización preventiva -otro dato político de fuste- de la Prefectura Naval para evitarlo.>

En cuanto al presidente, tampoco se puede descartar que esté amasando en la soledad de El Calafate una respuesta política de alto voltaje que también contenga los ingredientes que sugería Perón. Versiones recogidas en Buenos Aires aseguraban que la planificación que podría estar pergeñando Kirchner en su retiro patagónico es continuar por ahora con el Operativo "Cristina 2007" y apuntar a generar muchos cambios en materia de gestión, a partir de diciembre próximo, inclusive con el diseño de un nuevo gabinete.>

El silencio que se aconseja en estos casos (otra "S", que deriva del secreto) no pudo ser perforado en conversaciones con quienes quedaron al comando del día a día en la Casa Rosada. "Descansando", fue la lacónica descripción que hizo un ministro en tres oportunidades, frente a tres consultas sucesivas. Apenas se permitió un "claro, como descansa él", cuando se le preguntó por la rutina que seguía el presidente en su casa de veraneo, desde cuyo parque posterior se observa a pleno el azul del portentoso Lago Argentino y la Costanera, por donde a diario hace Kirchner una caminata.>

La reflexión, que parece que no dice nada, no descarta nada tampoco en cuanto a las especulaciones de futuros escenarios que pudo haber imaginado el matrimonio presidencial en su retiro, conocido el temperamento de "animal político" que tiene incorporado Kirchner, a quien la jugada de su ex ministro pudo haber sorprendido en cuanto a la ocasión, pero no en su fundamento. "Estaba entre las posibilidades", señaló con mucha tranquilidad el funcionario.>

En cuanto a la jugada del ahora candidato presidencial, Lavagna decidió que ya no podía seguir esperando, superado el plazo que él mismo se había impuesto para construir (2006), lo que le impidió hacer, desde el cumplimiento de la palabra, el lanzamiento previo a la Navidad que tenía previsto. Algunas otras circunstancias no menores también lo habrían impulsado a decir ahora, en enero, que se lanzará formalmente en febrero. En primer término, la presión de sus eventuales aliados, quienes lo estaban invitando cordialmente a que se definiera (UCR), para no seguir regalando el tiempo. En segundo lugar, la sensación de que la tropa podría comenzar a dispersarse, sobre todo en ciertos punteros de distrito de fácil viraje que buscaban definiciones rápidas para decidirse dónde abrevar. Y por último, en la perentoria necesidad de comenzar a hacer lo antes posible un trabajo territorial de recorrido del país, palmo a palmo, para instalar la candidatura entre la gente, más allá de los diarios que él mismo eligió para difundirse.>

Como subproducto, y aunque sus allegados lo relativicen, Lavagna también le pasó un mensaje a Mauricio Macri y al resto de las fuerzas de oposición: "Conviene no dispersarse, porque juntos somos más", sería en síntesis su bajada de línea a eventuales apoyaturas. Desde fuentes cercanas al macrismo se dice desde hace tiempo que ellos no van a sumarse a nada que imponga ideas a libro cerrado, tal como se consideró la solicitada que Lavagna dio a conocer hace algo más de un mes. Hasta el momento, el presidente de Boca no acusó recibo y sus allegados siguen mirando para otro lado, salvo Ricardo López Murphy, quien ya habló de las visiones diferentes y de la lejanía de ambos proyectos, algo más que notorio para los observadores, pero además de que ya no queda espacio para construir algo en común.>

Hoy, la única posibilidad de convergencia que tiene sustento no pasa por el lado de las ideas, ya que allí hay un notorio divorcio entre el demonizado conservadurismo de Macri y el autodenominado centro-progresismo de Lavagna, sino por el costado práctico: que cada uno haga la suya, sin atacarse, pero en diferentes distritos y en eso están trabajando aun los operadores más esperanzados en el acercamiento, cuyo único fundamento es no dispersar votos. El punto crítico es que ninguno de los dos postulantes quiere bajarse por ahora del premio mayor de la candidatura presidencial.>

Más allá de las preocupaciones propias y ajenas a las que lo somete la política local, el presidente probablemente usó también su estadía en el Sur para reflexionar sobre si la teoría de Perón que relataba Don Vicente tiene posibilidades de ser aplicada en el caso Uruguay. El planteo de fondo es cómo salir del atolladero al que lo llevó la necesidad política de no confrontar abiertamente con la asamblea de Gualeguaychú con una solución que sea a la vez seria y sorpresiva, ya que la cuestión del secreto está implícita en la metodología que usa la diplomacia.>

En relación al meollo del caso, el próximo viernes será un día más que importante, ya que el Tribunal de La Haya deberá decidir entonces si hace lugar o no a la queja uruguaya por daños económicos, ante el corte sistemático de las vías de acceso al país, desde el occidente. Todo hace prever que una vez más el Tribunal fallará en contra de la Argentina y que el poder político deberá entonces arbitrar los medios para liberar los puentes, ayudado ahora porque lo que el gobierno creyó que era una causa nacional se ha diluido de tal forma que apenas se concentra en una región o una ciudad.>

Igualmente, el acercamiento con el Uruguay no será fácil, ya que las informaciones indican que Tabaré Vázquez exhibe cada vez más dureza y presiona con gestos.>

El presidente Vázquez ha dicho claramente que no está dispuesto a dialogar con la Argentina hasta que no se suspendan los cortes en los puentes y esta exigencia pone a Kirchner en un brete, ya que no puede llegar a un diálogo constructivo con tamaño condicionamiento. Si hay fallo el día 12, habrá alivio en ese sentido y si se logran levantar los cortes antes de la cita en Río, el panorama podría cambiar.>

>

>