Argentina no está en la mesa grande del nuevo "commoditie"
Sin carné del "club del etanol"
Durante su estadía en Brasil, el presidente George Bush analizará, entre otros temas, una alianza con el vecino país por biocombustibles. La idea es que el etanol se convierta en un "commoditie" que cotice en el mercado mundial. Argentina no está en ese grupo.

Por Pablo AdreaniAnalista del mercado de granostitular de Agri-PAC Consultores

Estados Unidos y Brasil, o casi el 70 por ciento del etanol mundial, se encuentran hoy (a través de la cumbre de sus presidentes George Bush y "Lula" da Silva, en San Pablo) para comenzar a fundar la estandarización del etanol como commoditie no ya cotizante en Chicago sino a nivel global. Así podría aparecer en otros mercados al igual que el petróleo, un combustible al cual se pretende reemplazar parcialmente por dicho alcohol.

Los estadounidenses no van a perder tiempo con el problema de una díscola Venezuela y su crudo; van a poner manos a la obra en sustitutos como el etanol, para poder usufructuarlo sin más barreras que las arancelarias o las que imponga la logística.>

Nuestro país, en tanto, marcha a otra velocidad, sensiblemente más lenta: ha perdido tres años en materia legislativa, contrariando las expectativas de un sector privado que ve en el uso de alcohol combustible y biodiesel una oportunidad, hasta ahora subaprovechada.>

La adopción de una nueva matriz energética (y su derivación a nivel alimentario), más allá de su rótulo de "menos contaminante y renovable", apunta evidentemente a depender menos del petróleo (y para Estados Unidos de países hostiles, que son sus principales proveedores). Hace poco hablamos de una Nuevo Orden Agrícola Mundial, y el capítulo de la bioenergía no es ajeno a esta iniciativa. No obstante, hasta la ONU alertó sobre los riesgos ambientales de una expansión masiva en la producción de etanol, en función de conocer su impacto ambiental y aun social. Legisladores estadounidenses quieren debatir en el Congreso una reducción de las tarifas de importación de alcohol, pues crece la oposición de las entidades de productores ganaderos que ven cómo sus costos productivos aumentan de la mano de un maíz caro y que se destina cada vez en mayor proporción a las fabricación de etanol.>

Brasil, que tiene miles de opositores a un acuerdo con Estados Unidos, incluso dentro de las filas oficialistas, es probablemente el país más avanzado en materia de obtención de etanol a partir de caña de azúcar, proceso más rendidor que el estadounidense basado en el maíz.>

Se dice que Bush quiere borrar sus fracasos en política exterior en este tramo final de su gobierno y se desconfía de que Washington acceda a eliminar impuestos; a la vez que el otro potencial socio del "Club" -Brasilia- vislumbra ventajas en la relación bilateral. De hecho, "Lula" viajará el próximo 31 al país del Norte y avanzará en la alianza, más allá de lo que hagan los gobiernos de Argentina, Bolivia, Venezuela o Ecuador. Una de las cuestiones que también busca, aunque por motivos distintos a los de Estados Unidos, es transformar al etanol en un commodities.>

Otro de los objetivos del viaje es evitar que jugadores de Oriente -Japón, India o China-, se apoderen de una tajada significativa del etanol brasileño y de su tecnología. Estados Unidos va a querer cautivar al proveedor brasileño y abrir un "Club global" que beneficie también a socios no fundadores, con mecanismos de subsidios, equilibrio en el precio del maíz y colocación ventajosa de saldos exportables.>

Habrá que ver hasta qué punto conviene a los productores brasileños que baje el arancel del 2,5 por ciento que cobra Estados Unidos por importar. Pues, a una menor oferta de maíz seguiría una menor demanda para etanol, haciendo normalizar el precio de la materia prima. Por de pronto, importantes empresarios del ramo agroindustrial estadounidense están en San Pablo y acompañan la movida de su gobierno.>

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¿Y el trigo?

Nuevamente cerrado el Registro de Exportaciones, desde mediados de este mes podría haber novedades en el precio interno, ya que se espera que los molineros del Brasil vuelvan a necesitar de lotes en nuestro mercado FOB. Si a esto le sumamos la demanda nacional podemos estar ante un repunte en el mercado que, indirectamente, beneficiaría a los productores brasileños. De hecho, estimaciones privadas ya hablan en el país vecino de una probable producción de 4,2 millones de toneladas, dos millones más que en la última campaña.