EFE
La serie "Mujer tendida en la playa", que incluye las seis obras posiblemente más enigmáticas de la producción artística de Pablo Picasso, podría relacionarse "con imágenes de la alquimia y el esoterismo", afirmó Elizabeth Cowling, profesora de la Universidad de Edimburgo.
Estas seis piezas presentan "una evolución extraordinaria" pese a que se pintaron en un mismo fin de semana, afirmó esta experta, una de las principales especialistas en Picasso, que presentó este jueves el libro "La serie `Mujer tendida en la playa' ", editado por el Museo Picasso de Málaga, ciudad andaluza del sur de España.>
En concreto, el artista malagueño comenzó la serie de seis obras -tres de las cuales están expuestas en el Museo de Málaga- el viernes de la Semana Santa de 1932, continuó el sábado, descansó el Domingo de Resurrección y concluyó la última obra el lunes.>
Cowling sostiene la posibilidad de que Picasso pensara destinar la pieza más grande de la serie a una exposición retrospectiva de su obra que se estaba organizando en ese momento, aunque al final decidió no exponerla, quizás porque podría relacionársele con surrealistas como Max Ernst o Miró.>
"No quería verse etiquetado como parte de la escuela surrealista ni de ninguna otra", dijo la experta.>
Apuntó asimismo que el artista español solía pintar en 1932 obras "con colores muy vivos, y éstas son muy diferentes y recuerdan al cubismo, con colores más suaves y tranquilos, y quizás más misteriosos".>
"Aunque se habló de esta serie como `Mujer tumbada en la playa al sol', el sol sólo está presente en las dos primeras obras y las cuatro restantes están bañadas de la luz de la luna", añadió.>
También señaló que las dos primeras obras presentan "tonalidades más tranquilas y pálidas, las siguientes, los mismos colores con tonalidades más intensas y la última es la de mayor intensidad".>
En los años 30 del siglo pasado, Picasso "trabajaba en dos extremos y podía simultanear obras con grises, blancos, negros y sepias, como el `Guernica', con otras de colores vivos y explosivos, y esta serie está a mitad de camino", según Cowling.>
La experta observa además en la serie un proceso hacia un trabajo "más ordenado" y en el segundo cuadro, "más medido y calculado" que el primero, está "convencida" de que Picasso "utilizó al menos una regla para tomar medidas".>